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Sao Paulo, 10 jul (EFE).- La Copa Libertadores le ha pasado factura a todos menos a Corinthians, que este domingo venció por la mínima a Flamengo y recortó distancias con el líder Palmeiras, que sufrió un apagón en Fortaleza, en una decimosexta jornada de la Liga brasileña marcada por el adiós de Fred.

El conjunto que dirige el portugués Abel Ferreira venía de endosarle cinco goles a Cerro Porteño en los octavos de la Libertadores, pero hoy no pudo pasar del 0-0 ante un Fortaleza que sigue colista de la clasificación con apenas dos victorias.

El partido duró más de la cuenta debido a un cortocircuito que dejó a oscuras el Arena Castelao cuando el cronómetro iba a marcar el minuto 90.

El mismo que sufrió el cuadro paulista, que, con un once con bastantes titulares, evitó una derrota sonrojante gracias a su portero, el internacional brasileño Weverton. El mal estado del terreno de juego tampoco ayudó.

Luego llegó el apagón real del Castelao. La electricidad no volvió y, cuando pasó la media hora de espera que marca el reglamento, los jugadores se cambiaron la camiseta y a casa.

El punto sabe poco para el todopoderoso Palmeiras, que ve reducir su distancia al frente del Campeonato Brasileño a tan solo un punto.

El aliento que sienten los verdiblancos es el del Corinthians, que se impuso a Flamengo por un ajustado 1-0 en un clásico sin demasiada historia entre los dos clubes más populares de Brasil.

Los dirigidos por el también portugués Vítor Pereira no tuvieron ni que marcar gol para llevarse los tres puntos. Ya lo hizo por ellos el lateral flamenguista Rodinei, que metió el balón en su propia portería en el arranque de la segunda mitad.

El cuadro carioca, que venía de atropellar por 7-1 a Deportes Tolima en la Libertadores, tampoco le puso muchas ganas al choque, pues saltó al césped del Neo Química Arena de Sao Paulo con una alineación formada en su mayoría por suplentes.

El que no supo aprovechar el traspiés palmeirense fue Atlético Mineiro, el tercero en discordia. El club de Belo Horizonte fue incapaz de superar el 0-0 ante Sao Paulo y continúa tercero. Ambos equipos también venían de jugar competición internacional esta semana.

Otro de los que disputó Libertadores fue Athletico Paranaense, que el sábado claudicó por 2-1 en la casa de Goiás. De nada les sirvió el tanto del mediapunta uruguayo David Terans a los de Luiz Felipe Scolari.

Pero el momento más emotivo de la jornada fue el adiós en el Maracaná del experimentado goleador y multicampeón brasileño Fred, ídolo de Fluminense.

El delantero cuelga las botas a los 38 años de edad por motivos de salud, pues sufre diplopía, un problema de “visión doble” que le ha obligado a adelantar su retirada.

La del sábado fue una noche mágica y cargada de emociones para el exjugador de Olympique de Lyon, que acabó llorando a pie de campo ante los miles de aficionados que corearon su nombre en el histórico estadio carioca.

“Prometí en casa que no a iba a llorar porque ya lloré demasiado. Tengo que conseguir expresar un poco la gratitud que siento por todo lo que hizo este grupo, esta hinchada…. Es el club más humano que conocí en toda mi vida”, declaró el ariete con la voz entrecortada, tras la victoria por 2-1 ante Ceará.

Frederico Chaves Guedes pone fin a una exitosa carrera de dos décadas en la que reventó varios récords goleadores. Ha marcado 417 tantos, casi la mitad de ellos con la elástica del ‘Flu’ (199).

Es el segundo mayor goleador de la historia del Campeonato Brasileño y el número uno desde que se adoptó el actual formato de puntos corridos (158).

También es el máximo artillero de la Copa de Brasil (37) y el tercero entre los brasileños de la Copa Libertadores (25). Números de estrella para este efectivo goleador no siempre valorado cuando jugó con la selección, con la que se proclamó campeón de la Copa América 2007 y la Copa Confederaciones 2013.

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