Publicidad

Santiago de Chile, 7 may (EFE).- El presidente de Chile, Gabriel Boric, dijo que el país tiene “una oportunidad histórica para reconciliarse” y que espera que la gente vote “informada” y “sin miedo” en las elecciones constituyentes de este domingo.

“Como país, tenemos una oportunidad histórica para reconciliarnos, después de las fracturas que hemos vivido, y avanzar hacia un país desarrollado e inclusivo, donde nadie se quede atrás”, dijo Boric, tras depositar el voto en su natal Punta Arenas, en el extremo sur.

El gobernante, quien se desplazará ahora a Santiago para seguir el transcurso de la votación desde el palacio de La Moneda, aseguró que tanto el Gobierno como los partidos políticos que lo sustentan respetarán “a rajatabla” los resultados de estos comicios constituyentes, los segundos en dos años.

“Sea cual sea el resultado, la elección de los nuevos consejeros configura un avance para el país, donde hemos sido capaces en ponernos de acuerdo para darle continuidad a un proceso que no ha sido fácil”, añadió.

Más de 15,1 millones de ciudadanos escogen este domingo a los 50 consejeros que redactarán una segunda propuesta de Constitución, tras el fracaso que vivió el primer texto en el plebiscito del pasado septiembre.

A diferencia de la efervescencia del proceso anterior, estos comicios están marcados por la falta de interés ciudadano.

La fatiga electoral -desde las protestas de 2019, Chile ha celebrado siete elecciones-, el fracaso del proceso anterior y la inédita crisis de seguridad que atraviesa el país explican, según los expertos, la desafección hacia estas elecciones.

El exlíder estudiantil pidió que las elecciones no sean “una pelea política a corto plazo o una pelea entre políticos” e instó “a pensar no en la próxima elección, sino en la próxima generación”.

“Confío en la sabiduría del pueblo chileno y espero que la gente vote informada, sin miedo”, agregó.

Aunque es difícil hacer pronósticos por la gran apatía y porque el voto es obligatorio -al contrario que hace dos años-, hay consenso en que la correlación de fuerzas será muy diferente a la anterior convención constituyente, dominada por la izquierda.

La derecha y la ultraderecha son las grandes favoritas y la clavé está en si conseguirán los escaños suficientes (30 o más) para aprobar las normas constitucionales sin necesidad de negociar.

“Ha habido en nuestra historia reciente un aprendiza importante sobre qué es lo que sucede cuando nos atrincheramos, cuando quienes legítimamente piensan distinto y no conversan entre ellos. Hoy tenemos la oportunidad de hacerlo de una manera distinta”, reconoció el mandatario.

“Generemos un debate en el que las legitimas diferencias se planteen, pero siempre teniendo por delante a nuestro pueblo. Esta vez no hay margen de error”, concluyó.

Publicidad