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Jair Bolsonaro del partido PSL (i) y Marina Silva del partido RED participaron en un acalorado debate entre los candidatos a la Presidencia de la República.

El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva sigue como favorito para las elecciones de octubre próximo y, pese a estar preso por corrupción y a que su candidatura puede ser vetada, tiene alrededor de un 37 por ciento de intención de voto, según dos encuestas divulgadas este lunes. 

Sin embargo, enfrentaría grandes obstáculos para lograr que su aparente heredero, al exalcalde de Sao Paulo Fernando Haddad, fuera elegido si él no pudiera competir.

Un sondeo realizado por la firma MDA para la Confederación Nacional de Transporte (CNT, patronal), con un margen de error de 2,2 puntos porcentuales, sitúa a
Lula con un apoyo del 37,3 por ciento. 
En segundo lugar se encuentran el ultraderechista Jair Bolsonaro (18,3 por ciento), seguido de la ecologista Marina
Silva (5,6), el socialdemócrata Geraldo Alckmin (4,9), el laborista Ciro Gomes (4,1) y el liberal Álvaro Dias (2,7).

Otra encuesta, también divulgada este lunes por el Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadística a pedido de la Red Globo de Televisión y el diario ‘O Estado’ de Sao Paulo, presenta un escenario similar, con Lula al frente. El exgobernante tiene, según Ibope, un 37 por ciento de intención de voto, contra el 18 que el sondeo le atribuye a Bolsonaro. Marina Silva cuenta con un 6 por ciento de apoyo, mientras que Gomes y Alckmin están empatados con el 5 , según la encesta Ibope, que tiene un margen de error de dos puntos porcentuales y escuchó a 2.002 electores de 142 municipios entre el 17 y 19 de agosto.

Lula está en prisión desde abril pasado, con una condena a doce años por corrupción confirmada por un tribunal de segunda instancia, lo que según las normas electorales brasileñas le impediría postular a cualquier cargo público. La Justicia electoral tiene plazo para resolver la situación de Lula hasta el 17 de septiembre, cuando faltarán 20 días para las elecciones.

El PT aún no lo ha oficializado, pero si Lula fuera vetado por su situación jurídica, la candidatura de esa formación sería asumida por Fernando Haddad, compañero de formula del exmandatario, quien sería acompañado por la comunista Manuela D’Ávila.

El sondeo de la firma MDA también contempló esa posibilidad y dice que, entre aquellos que declaran su voto en Lula, solamente un 17,3 por ciento se inclinaría por Haddad si finalmente fuera el candidato. 

Otro 11,9 del 37,3 por ciento de electores que apoya a Lula se volcaría en Marina Silva, mientras que un 9,6 optaría por Ciro Gomes y un 6,2 respaldaría al ultradrechista Bolsonaro.

De acuerdo con la encuesta Ibope, en un escenario sin Lula, Haddad tan solo obtendría el 4 por ciento de los votos, frente al 20 de Bolsonaro. Marina
Silva llegaría al 12, Ciro Gomes (9), Alckmin (7), y Dias (3), mientras que el resto de candidatos no pasarían del 1 por ciento.

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