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Río de Janeiro, 3 jun (EFE).- El porcentaje de brasileños que rechaza el aborto y que pide que esa práctica sea completamente prohibida en Brasil cayó nueve puntos porcentuales en los últimos cuatro años, según una encuesta divulgada este viernes.

De acuerdo con el sondeo realizado por la firma Datafolha, el porcentaje de brasileños que defiende la penalización de la interrupción del embarazo pasó del 41 % en diciembre de 2018 a 32 % en mayo de este año.

Ya para quienes avalan que la práctica se realice sin restricciones, el porcentaje subió del 6 % al 8 %, en el mismo período.

La legislación vigente en el gigante suramericano permite que una mujer interrumpa el período de gestación solo en casos de violación, riesgo para la madre y anencefalia fetal.

Si una mujer se somete a un aborto fuera de estos parámetros puede llegar a ser condenada a hasta tres años de prisión.

Actualmente, el 39 % de los brasileños considera que la práctica se debe mantener bajo la legislación actual y un 18 % piensa que se debería permitir en más casos que los estipulados por la ley.

Según la encuesta, únicamente el 9 % de las mujeres está de acuerdo con que el aborto se realice sin restricciones, mientras que los más jóvenes defienden que sea practicado en más casos y no solo en los que señala la ley.

En 2017, el Partido Socialismo y Libertad (PSOL) interpuso un recurso ante la Corte Suprema de Justicia para que el aborto hasta la décimo segunda semana de gestación dejara de ser un crimen, pero hasta el momento el tema no ha sido juzgado.

El debate por la despenalización del aborto ha sido fuertemente criticado por el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien en varias oportunidades se ha declarado públicamente en contra de esa práctica y ha venido utilizando el tema para ganar votos en las bases cristianas.

El líder ultraderechista espera ser reelegido en las presidenciales de octubre próximo, pero la ventaja la lleva su principal rival, el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, quien según los sondeos electorales ganaría las elecciones en primera vuelta.

En medio de la disputa electoral, Bolsonaro tildó a Lula de “genocida” hace poco más de un mes por señalar que el aborto debe ser tratado como un tema de salud pública.

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