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Roma, 11 jul (EFE).- Cuarenta años después de lograr un histórico triunfo en el Mundial de España’82, la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) ha decidido exponer la Copa del Mundo lograda por su selección que, con aquella icónica victoria, se convirtió en campeona mundial por tercera vez.

El palco de la final del Mundial de España 1982, en una imagen de archivo. EFE/fs

El 11 de julio de 1982, la Italia dirigida por Enzo Barzot, capitaneada por Dino Zoff y compuesta por jugadores inolvidables como Paolo Rossi, Bruno Conti o Marco Tardelli levantó el trofeo en el estadio Santiago Bernabéu tras la final ante la aún Alemania occidental (3-1), en presencia del presidente de la República, Sandro Pertini.

El portero y capitán de la selección de Italia, Dino Zoff (c), y el defensa Claudio Gentile (c-izda), levantan el trofeo que les acredita como campeones del mundo en 1982, en una imagen de archivo. EFE/fs

El recuerdo de los saltos de júbilo de Pertini, a sus 85 años, todavía perduran en la memoria de los italianos, para quienes aquel triunfo supuso un momento de inolvidable, pero también un acontecimiento que abrió una nueva página en la historia del país, que lo celebra estos días con programas especiales en los medios de comunicación que recuerdan la gesta del equipo.

Entrevistas a los protagonistas, con imágenes del momento, y documentales acaparan estos días el interés de las cadenas de televisión, mientras los periódicos dedican páginas enteras a una gesta que, cuatro décadas después, se ha convertido en seña de identidad de los italianos.

Entre las celebraciones destaca la iniciativa de la FIGC de exponer la Copa en su sede en Roma, donde todos los italianos y turistas que deseen rendir este homenaje a ese histórico equipo podrán hacerlo visitando su sede entre las 09.00 y las 18.00 horas locales (07.00-16.00 GMT), anunció el organismo.

“Una iniciativa para celebrar junto a todos los italianos un momento de alegría y orgullo nacional, pero sobre todo un acontecimiento que abrió una nueva era y se convirtió en una piedra angular de la historia reciente de nuestro país”, explica la FIGC en su página web.

Se trata de “imágenes que quedarán para siempre en el corazón de los italianos, desde el grito de Tardelli tras el gol del 2-0 contra los alemanes, hasta los goles magistrales de Rossi que llevaron a Italia hasta la final, pasando por la exultación del presidente Pertini, el papel fundamental del “timonel” Bearzot, o el capitán Dino Zoff levantando la Copa en señal de triunfo”, añade.

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