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Londres, 6 mar (EFE).- El Gobierno conservador británico anunció este lunes que investiga las “circunstancias” en las que Sue Gray, la alta funcionaria que elaboró el informe sobre las fiestas en Downing Street durante la pandemia, ha presentado su dimisión para ocupar un cargo en el opositor Partido Laborista.

El fichaje de una de las más altas funcionarias de la administración pública por el primer partido de la oposición “no tiene precedentes”, dijo en la Cámara de los Comunes el secretario de Estado del Gabinete, Jeremy Quin, que recalcó que el código que rige el trabajo de los funcionarios exige “imparcialidad”.

Gray, de 64 años, se convirtió en una figura pública el año pasado, cuando dirigió las pesquisas sobre las polémicas celebraciones ilegales en Downing Street, el llamado “Partygate”, que desencadenaron la dimisión del ex primer ministro conservador Boris Johnson.

“La imparcialidad y la percepción de imparcialidad del cuerpo de funcionarios es un aspecto constitucionalmente vital de la conducta del Gobierno”, señaló Quin, que aseguró comprender “por qué algunos miembros de esta cámara han expresado preocupación” al respecto.

El diputado conservador Robert Buckland, exministro de Justicia, que propició el debate parlamentario de este lunes con una pregunta urgente sobre la decisión de Gray, conminó al Ejecutivo a “defender la imparcialidad” de la administración pública.

El secretario de Estado subrayó que el Comité Asesor sobre Designaciones Empresariales (ACOBA, en inglés), con capacidad para recomendar qué puestos laborales pueden aceptar altos cargos del Estado, aún no se ha pronunciado sobre el caso de Gray.

“Confío en que el Partido Laborista seguirá las recomendaciones de ACOBA. En otro caso, arrojarían aún más dudas sobre su credibilidad”, afirmó Quin.

Angela Rayner, líder adjunta de los laboristas, indicó por su parte que Gray es “una funcionaria de alto nivel conocida por su integridad y dedicación al servicio público”, que ha decidido “unirse al partido que tiene un plan real para el Reino Unido”.

Rayner acusó a quienes expresaron dudas sobre la integridad de Gray de divulgar “teorías conspiranoicas”.

“¿Qué van a pedir ahora, un debate en Westminster Hall sobre el viaje a la Luna, una ley para vaciar el agua del lago Ness o una investigación pública para dilucidar si la Tierra es plana?”, declaró la laborista.

Según las encuestas, el primer partido de la oposición mantiene una sólida ventaja para hacerse con el poder en las próximas elecciones generales en el Reino Unido, previstas para finales del próximo año.

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