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Lima, 17 may (EFE).- El primer ministro de Perú, Alberto Otárola, pidió este miércoles que la mandataria Dina Boluarte pueda viajar al extranjero para ejercer la “diplomacia presidencial” que ubique al país en los eventos internacionales y, en forma paralela, seguir dirigiendo el Ejecutivo de forma remota, al sustentar el proyecto de ley que propone este cambio en el ejercicio de la jefatura de Estado.

Otárola afirmó que “la participación de un presidente siempre va a ser un acto de política exterior de alto nivel, porque se va a reunir con sus pares, garantiza la visibilidad internacional, y estará combatiendo cualquier situación de aislamiento”.

Boluarte no ha salido del país desde que asumió la Presidencia de forma constitucional el pasado 7 de diciembre, cuando el exmandatario Pedro Castillo (2021-2022) intentó dar un golpe de Estado y quedó detenido por el delito de rebelión. Ahora el Ejecutivo ha visto la necesidad de que la mandataria retome la agenda internacional.

Ella era la vicepresidenta de Castillo y, al asumir la jefatura de Estado, no hay otra persona que pueda tener ese encargo, en caso de una salida de la mandataria al exterior, tal y como mandan las leyes peruanas.

Otárola acudió a la Comisión de Constitución del Congreso para sustentar el proyecto de ley que modifica la ley orgánica del Poder Ejecutivo para desarrollar el encargo y gestión remota del despacho de la Presidencia de la República.

Otárola recordó que la pandemia impulsó el trabajo remoto y el uso de las tecnologías digitales, las cuales han sido asimiladas por todos los poderes del Estado, con la participación a sesiones en forma virtual, el uso de firmas digitales y un marco legal específico.

“Si es que el Congreso autoriza a (la presidenta a) salir uno, dos, o tres días, tendrá que seguir administrando el despacho presidencial (en forma remota)”, precisó el jefe del gabinete.

Añadió que Boluarte tampoco va a hacer un uso extensivo de esa facultad, “sino que va a pedir permiso para viajar donde sea necesaria su presencia”.

“La presidenta, a la fecha, cuenta con todo el marco legal correspondiente que le permite ejercer el cargo en forma digital desde el exterior”, subrayó Otárola.

La comisión parlamentaria tiene que debatir y votar este proyecto de ley, antes de su eventual debate y votación en el pleno del Congreso para que el cambio se haga oficial.

Por su parte, la canciller Ana Cecilia Gervasi remarcó ante la comisión de Constitución la importancia de que Boluarte pueda “tomar contacto directo” con otros mandatarios en el exterior, “generar lazos de empatía y confianza que se generan cuando se reúnen entre ellos”, así como dirigir la política exterior del país.

Gervasi citó que las próximas reuniones internacionales a las que Boluarte debe asistir son la cumbre de jefes de Estado de Sudamérica convocada por el mandatario de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el 30 de mayo y la Cumbre de Jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y de la Unión Europea anunciada en Bruselas para julio próximo.

Asimismo, la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre, donde Boluarte “debe decirle al mundo cuáles son las perspectivas del Perú, respecto a su integración al mundo” y dejar de manifiesto que “Perú está de vuelta y tiene que hacerlo notar a todos los países”, expresó la ministra de Relaciones Exteriores.

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