WASHINGTON DC, 28 ABRIL.- Un informe de las agencias de inteligencia de Estados Unidos ha sembrado dudas sobre la responsabilidad directa del presidente ruso, Vladimir Putin, en la muerte del opositor Alexéi Navalni. Según medios estadounidenses, el informe concluye que, si bien no se exime de culpa a Putin, es “probable” que no haya ordenado directamente el asesinato de Navalni.
Esta conclusión contrasta con la postura del presidente Joe Biden, quien responsabilizó directamente a Putin de la muerte del opositor ruso y impuso sanciones a Rusia como represalia. En una rueda de prensa, Biden afirmó que “no hay duda de que la muerte de Navalni es consecuencia de algo que hicieron Putin y sus matones”.
El informe de inteligencia, sin embargo, no ha podido aclarar la causa del fallecimiento de Navalni en febrero pasado. Las autoridades rusas atribuyeron la muerte a un malestar repentino mientras Navalni se encontraba en prisión.
Navalni, un férreo crítico del gobierno de Putin, había sobrevivido a un intento de envenenamiento con el agente químico Novichok en 2020. Su salud se deterioró notablemente tras una huelga de hambre que realizó en 2021, y su traslado a una prisión en el círculo polar ártico generó preocupación sobre su bienestar.
La revelación de este informe de inteligencia plantea nuevas interrogantes sobre la muerte de Navalni y la posible implicación del gobierno ruso. Si bien la duda sobre la responsabilidad directa de Putin puede generar un cambio en la narrativa oficial, la comunidad internacional sigue exigiendo una investigación exhaustiva e independiente sobre el fallecimiento del opositor ruso.
El caso de Navalni pone de manifiesto las tensiones entre Rusia y Occidente, y la preocupación por la represión de la disidencia política en el país. La falta de claridad sobre las circunstancias de su muerte deja un manto de duda y exige una mayor transparencia por parte de las autoridades rusas.
