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Lima, 26 abr (EFE).- La líder conservadora peruana Keiko Fujimori fue operada este miércoles “sin ningún contratiempo” para extirparle un tumor tiroideo y determinar si implica algún riesgo para su salud, informó el portavoz del partido Fuerza Popular, Miguel Torres.

El representante del fujimorismo señaló en Twitter que, “a pedido de Keiko y su familia”, informaba que a las 9.00 hora local (14.00 GMT) “se llevó a cabo la operación para la extracción de la tiroides según lo programado por sus médicos”.

“La intervención ya culminó sin ningún contratiempo”, añadió antes de indicar que “ella se encuentra en este momento en recuperación”.

El portavoz de Fuerza Popular sostuvo que “lo que toca ahora es hacer una patología del tumor extraído para poder definir su naturaleza exacta y posterior tratamiento”.

“Keiko agradece las muestras de preocupación y solidaridad recibidas. Por indicaciones médicas guardará absoluto reposo”, agregó Torres.

Fujimori anunció el pasado 20 de abril en Twitter que le habían detectado un tumor tiroideo “de 4 x 2 cm aproximadamente, diagnosticado como neoplasia folicular, sistema de Bethesda de tiroides 4”.

Agregó que esta semana iba a ser “sometida a una operación para extirparlo y definir su naturaleza exacta”.

“Hasta ese momento, mi familia y yo guardaremos reserva de cualquier detalle adicional. Hago pública esta información para evitar cualquier tipo de filtración o mala interpretación”, señaló la líder de Fuerza Popular.

La hija y heredera política del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) vivió en 2021 su tercera derrota consecutiva en unos comicios presidenciales en los que se impuso el profesor Pedro Castillo (2021-2022), quien hoy cumple prisión preventiva por supuestos actos de corrupción durante su gestión y por intentar perpetrar un golpe de Estado en diciembre pasado.

En las últimas elecciones, Fujimori no solo vio nuevamente frustradas sus ambiciones presidenciales sino también la posibilidad de eludir temporalmente una acusación fiscal de más de 30 años de cárcel por presunto lavado de activos y organización criminal, así como la opción de liberar a su padre, condenado a 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad.

La política afronta actualmente un proceso judicial por presuntos aportes irregulares de la empresa brasileña Odebrecht en las campañas presidenciales de 2011 y 2016, cuando fue superada en las urnas por el exmilitar Ollanta Humala y por el economista Pedro Pablo Kuczynski, respectivamente.

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