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TAIPEI, 04 ABRIL.- El impresionante Taipei 101, el rascacielos más alto de Taiwán, se convirtió en el foco de atención durante un fuerte terremoto gracias a una maravilla de la ingeniería: una gigantesca esfera de acero que demostró su valía al proteger el edificio y a sus ocupantes. El miércoles, cuando un temblor de magnitud 7,4 sacudió la isla, esta esfera amarilla, conocida como un “amortiguador de masa sintonizada”, balanceó heroicamente para absorber el impacto y reducir el movimiento del edificio hasta en un 40%.

Ubicada en el centro de Taipei 101, la esfera de 730 toneladas es visible para el público y forma parte de las atracciones turísticas de la capital taiwanesa. Diseñada para oscilar durante terremotos y tifones, la esfera actúa como un contrapeso que contrarresta los movimientos violentos, como lo evidencian las imágenes de circuito cerrado que muestran al rascacielos apenas moviéndose mientras el entorno se sacude con fuerza.

La importancia de esta esfera no solo radica en su capacidad para proteger el edificio ante desastres naturales, sino también en el contexto de Taiwán, una región propensa a los terremotos debido a su ubicación en el Anillo de Fuego. Con 101 pisos y una altura de 508 metros, Taipei 101 incorpora una serie de características de diseño que aumentan su resistencia, como pilotes profundos y una infraestructura eléctrica redundante para reducir el riesgo de cortes.

No obstante, este enfoque en la ingeniería de resistencia no es exclusivo de Taipei 101. A nivel mundial, varios rascacielos utilizan sistemas de amortiguación para garantizar su estabilidad en condiciones extremas. Esto recuerda el caso de un edificio en Nueva York en la década de 1970, donde un amortiguador de masa sintonizada ayudó a prevenir un posible colapso, destacando la importancia de la innovación en la arquitectura de rascacielos.

La esfera de Taipei 101 no solo ha demostrado su eficacia durante terremotos, sino también frente a poderosos fenómenos naturales, como un ciclón en 2015. Este enfoque en la ingeniería estructural avanzada no solo resalta el genio humano, sino que también sirve como un recordatorio de la importancia de la seguridad en la construcción de edificios icónicos en todo el mundo.

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