Brasilia, 2 ago (EFE).- Las tres mayores entidades de la prensa brasileña publicaron este martes un documento en defensa del sistema democrático e instaron a que el resultado de las elecciones que celebrará el país el próximo 2 de octubre sea “respetado”.
El manifiesto fue publicado en forma conjunta por la Asociación Nacional de Diarios (ANJ, siglas en portugués), la Asociación Nacional de Editores de Revistas (Aner) y la Asociación Brasileña de Emisoras de Radio y Televisión (Abert), cuando faltan dos meses para las elecciones presidenciales, legislativas y regionales.
Las entidades reafirman en la carta “su compromiso con el Estado de Derecho y las decisiones soberanas de las elecciones, refrendadas por una Justicia electoral cuya actuación ha sido reconocida internacionalmente”.
Sin ser explícito, ese párrafo parece aludir a las presiones que el presidente Jair Bolsonaro, candidato a la reelección, mantiene contra el sistema electrónico de votación adoptado en 1996 por el país, que no ha sido objeto nunca de denuncias de fraudes pero que según el líder de la ultraderecha propicia las trampas.
El documento sostiene que “no existe democracia sin libertad de prensa y que no existe libertad de prensa sin democracia, que tiene como presupuesto un Estado de Derecho fundamentado en el respeto a los resultados electorales”.
Este manifiesto se suma a otros similares que han sido promovidos en las últimas semanas por diversos sectores de la sociedad, que incluyen desde medios académicos hasta empresariales y financieros, y que también han surgido como respuesta a los continuos ataques de la ultraderecha que encabeza Bolsonaro a las urnas electrónicas.
Uno de los más contundentes es impulsado por la Facultad de Derecho de la Universidad de Sao Paulo (USP), que ha recibido hasta ahora la adhesión de unas 700.000 personalidades y será leído por primera vez en público en un acto “por la democracia” convocado para el próximo 11 de agosto.
Bolsonaro mantiene su dura campaña de descrédito contra el voto electrónico desde poco más de un año, cuando todas las encuestas de opinión comenzaron a ubicar como claro favorito para las elecciones al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, su mayor antagonista en la política y candidato de un vasto frente progresista.
Según los últimos sondeos, Lula tiene una amplia ventaja y una intención de voto cercana al 45 %, frente al 30 % que se le atribuye al líder de la ultraderecha.
