Los seis principales líderes del partido federal se enfrentaron en el debate en inglés en Gatineau, Quebec, el lunes por la noche, intercambiando respuestas y acusaciones mientras buscaban salir del grupo en las últimas dos semanas de la campaña.
El único debate en inglés con los seis líderes del partido vio la discusión en cinco temas que incluyen: asequibilidad e inseguridad económica, medio ambiente y energía, asuntos indígenas, liderazgo en Canadá y en el escenario mundial y polarización en torno a los derechos humanos y la inmigración.
Sobre el primer tema de la noche, el liderazgo, el líder conservador Andrew Scheer salió balanceándose hacia las cercas, ignorando el tema para lanzar un ataque acalorado contra el líder liberal Justin Trudeau, a quien llamó un “fraude” que no merece ser primer ministro. .
“Señor Trudeau, usted es falso y es un fraude y no merece gobernar este país”, dijo Scheer, acusando a Trudeau de solo pretender defender a Canadá.
“Sabes que es muy bueno fingiendo cosas”, dijo Scheer. “Ni siquiera puede recordar cuántas veces se puso la cara negra porque el hecho es que siempre lleva una máscara”.
“Se pone una máscara de reconciliación y luego despide al fiscal general, el primero de origen indígena, se pone una máscara feminista y luego despide a dos empleadas fuertes por no aceptar su corrupción”.
Lisa Laflamme de CTV, una de las cinco moderadoras del debate, recurrió al líder del Partido Popular de Canadá, Maxime Bernier, y le preguntó si tenía el temperamento para el liderazgo, dados los comentarios incómodos que ha estado haciendo en Twitter sobre el cambio climático, la inmigración y sus oponentes
“Debes decir la verdad a los canadienses si quieres ser el líder de este país y lo que estoy diciendo sobre el multiculturalismo extremo no es la forma de construir este país”, respondió Bernier. “Sí, este país es un país diverso y debemos estar orgullosos de eso. Pero no necesitamos legislación como la ley de multiculturalismo para decirnos quiénes somos”.
El líder del NDP, Jagmeet Singh, dijo que el temperamento del liderazgo requiere que un líder busque cosas que unan a los canadienses, en lugar de dividirlos.
“Eso es lo que hace un líder y un líder trabaja para las personas que necesitan ayuda, no para ayudar a aquellos en la cima que hemos visto con los gobiernos en Ottawa durante demasiado tiempo”, dijo Singh.
Bernier interrumpió a Singh y luego interrumpió y habló sobre todos los demás líderes, incluido Scheer, que llamó a Bernier por sus posiciones antiinmigrantes.
“Puedes estar orgulloso de la historia de Canadá, puedes estar orgulloso de nuestra identidad, puedes estar orgulloso de las cosas que hemos hecho y logrado en el mundo y al mismo tiempo dar la bienvenida a personas de todo el mundo”, dijo Scheer.
Liderazgo es servicio: mayo
Trudeau dijo que el temperamento por ser un buen líder significaba buscar cosas que unieran a los canadienses en lugar de aprovechar cada oportunidad para encontrar cosas que enfrenten a un canadiense contra otro.
El líder liberal dijo que Bernier está “tratando de hacer que las personas tengan más miedo de las migraciones que están ocurriendo en el mundo y las oportunidades en torno a la globalización y nuestra capacidad de continuar redefiniendo cada día lo que es ser canadiense, lo que significa ser canadiense “.
Bernier respondió diciendo que querer hablar sobre inmigración no significaba que no amaba a Canadá.
“Sr. Bernier, su papel en este escenario esta noche parece ser decir públicamente lo que el Sr. Scheer piensa en privado”, dijo Trudeau.
La líder del Partido Verde, Elizabeth May, dijo que el liderazgo se trata de servicio y que cualquiera que quiera ser primer ministro tiene que ver el funcionamiento del país como un servicio para los canadienses.
El segundo segmento del debate se centró en la polarización, los derechos humanos y la inmigración.
El moderador, Althia Raj de HuffPost Canadá, le preguntó a Singh si estaba decepcionando a los canadienses al poner las posibilidades electorales de su partido antes de tomar una postura sobre el Proyecto de Ley 21 en Quebec, que prohíbe a ciertos funcionarios llevar símbolos religiosos en el trabajo
Proyecto de ley 21 divisiones
Singh dijo que el proyecto de ley 21 era algo que “me lastima, me hace sentir mal” y que dedicaría sus esfuerzos a los servicios que fortalecen a las personas.
El líder del bloque quebequense, Yves-Francois Blanchet, dijo que el 70 por ciento de las personas en Quebec apoya el proyecto de ley 21 y que el resto de Canadá debería reconocer que los quebequenses pueden decidir cómo quieren gobernar su propia provincia.
Trudeau atacó a Singh y dijo que si bien reconoció que el líder del PND había hablado elocuentemente sobre su experiencia con la discriminación, estaba decepcionado de que Singh no siguiera el ejemplo de Trudeau y dijera que dejaría la puerta abierta a una impugnación judicial de la ley federal.
“Sí, es incómodo políticamente, porque como dice Blanchet, es muy popular, pero yo soy el único en esta etapa que ha dicho: sí, un gobierno federal podría tener que intervenir en esto”, dijo Trudeau.
Singh dijo que vivir todos los días de su vida como una minoría religiosa visual fue cómo se puso de pie, a lo que Trudeau le preguntó por qué no tenía el coraje de defender sus convicciones.
Después del debate, Blanchet dijo que si bien no estaba de acuerdo con la posición de Trudeau sobre el Proyecto de Ley 21, al menos sabía dónde estaba parado, pero no podía decirse lo mismo de Scheer y Singh, quienes, dijo, dieron respuestas ambiguas.
Acceso al aborto
El debate se centró brevemente en el tema del aborto y el derecho de una mujer a elegir, que vio a Scheer enfrentando ataques de todos en el escenario.
“Las leyes de acceso sobre este tema no han cambiado durante 30 años bajo los primeros ministros liberales, bajo los primeros ministros conservadores, no cambiarán cuando sea primer ministro”, dijo Scheer.
Trudeau acusó a Scheer de respaldar a los candidatos para su partido que están decididos a eliminar el derecho de las mujeres a elegir si desean un aborto o no.
Singh saltó al acalorado intercambio para decir que “un hombre no tiene una posición en una discusión sobre el derecho de una mujer a elegir, seamos muy claros al respecto”, dijo.
May dirigió la pregunta a los cinco candidatos masculinos, diciendo que todos perdieron la oportunidad de pedir su inclusión en el debate de TVA en francés y mostrarles a las jóvenes que una mujer puede liderar un partido y postularse para primer ministro.
El líder del Partido Verde se puso del lado de Trudeau al acusar a Scheer de no ser claro acerca de su posición.
“Debemos ser claros como todos los líderes, y usted no es claro, Andrew, que nunca permitiremos una sola pulgada de retirada de los derechos de las mujeres en este país. Ni una pulgada”, dijo.
SNC-Lavalin y Quebec
Scheer se volvió hacia Trudeau y dijo que, a la luz de la violación de las leyes éticas por parte del líder liberal, específicamente con referencia al asunto SNC-Lavalin, ¿cuándo decidió que las reglas no se aplicaban a él?
“Sr. Scheer, el papel de un primer ministro es defender los trabajos de los canadienses, defender el interés público y eso es lo que he hecho y eso es lo que continuaré haciendo todos los días”, dijo Trudeau.
Scheer devolvió el fuego, acusando a Trudeau de mentirle a los canadienses. En respuesta, Trudeau le preguntó a Scheer si no hubiera defendido los trabajos en riesgo en SNC-Lavalin. Eso dejó una oportunidad para Blanchet, quien acusó a Scheer de usar SNC-Lavalin para promover su política, en detrimento de una empresa de Quebec.
“Cuando el señor Trudeau trató de encontrar una solución, lo hizo de manera incorrecta y lo admitió. Lo que está haciendo, señor Scheer … es que está intercambiando la idea de que Quebec es corrupto”, dijo Blanchet. “Esas 3.400 personas [que trabajan para SNC-Lavalin] no han hecho nada malo, ahora el valor de las acciones está bajando, los empleados se van, los clientes se van y nosotros lo estamos perdiendo por tu culpa”.
Scheer dijo que, independientemente de la situación económica, no había excusa para que un político interfiriera en un caso de un tribunal federal. “Es esencial que conservemos la independencia de nuestro sistema judicial”, dijo.
Cuestiones indígenas
Bernier dijo que todos los demás líderes están contentos con la situación y solo quieren modificar la relación que Canadá tiene con los pueblos indígenas. Dijo que buscaría implementar los derechos de propiedad sobre las reservas como un comienzo para una mejor relación.
May dijo que los líderes indígenas dicen que el problema número uno que enfrentan sus pueblos es el cambio climático y que es allí donde el gobierno debe actuar.
Trudeau dijo que heredó los objetivos climáticos del antiguo gobierno conservador, pero que los objetivos no son un plan y que ha implementado un plan que está marcando la diferencia.
May atacó a Trudeau con la frase de que “compró una tubería” y, por lo tanto, realmente no estaba luchando contra el cambio climático, a lo que Trudeau respondió que “un eslogan no es un plan”.
Volviendo a la relación indígena, Singh atacó a Trudeau por ordenar una revisión judicial de un reciente fallo del Tribunal de Derechos Humanos de Canadá que otorgó una compensación a los niños indígenas perjudicados por el sistema de bienestar infantil en la reserva y los servicios para niños y familias con fondos insuficientes.
“Quería luchar mucho para mantener a SNC-Lavalin fuera de las canchas, pero va a arrastrar a los niños indígenas a la corte. Eso está mal. ¿Cómo podría alguien hacer eso?” Singh preguntó.
Trudeau dijo que su gobierno había avanzado en temas indígenas de una manera que otros gobiernos nunca lo habían hecho antes, pero aún queda mucho por hacer. También dijo que los niños serían compensados cuando su gobierno pudiera garantizar que se haga de la manera correcta.
“Reconocemos el fallo del tribunal que dice que los niños deben ser compensados y los compensaremos”, dijo Trudeau.
“Pero también hemos avanzado para poner fin a las tragedias avanzando en la legislación que mantiene a los niños bajo cuidado, en sus comunidades, con su idioma, con su cultura”.
Scheer dijo que respaldó una revisión judicial porque cuando se trata de repartir miles de millones de dólares es importante hacerlo bien.
“Esta decisión tendrá ramificaciones enormes y enormes para varios aspectos de la forma en que el gobierno federal brinda servicios a los canadienses indígenas”, dijo Scheer.
“También es un monto de liquidación muy grande y significativo y creo que cuando se trata con este tipo de cuestiones importantes de política pública, es legítimo decir que debe revisarse”.
La desigualdad de ingresos
Un votante de Yellowknife preguntó a los líderes qué harían sobre el creciente problema de la desigualdad de ingresos en Canadá si se convirtieran en primer ministro.
May pidió una comisión para ver el código tributario para ver si es justo.
Trudeau promocionó sus recortes de impuestos de clase media y que seguiría adelante con otro recorte de impuestos para los canadienses de bajos y medianos ingresos, mientras acusaba a Scheer de apuntar sus recortes de impuestos hacia los ricos.
Bernier dijo que todos los otros líderes del partido quieren persistir en el déficit público, pero que equilibraría el presupuesto en dos años, en parte, recuperando $ 5 mil millones de la cancelación de los pagos de bienestar corporativo.
Singh dijo que dar dinero a las corporaciones para inversiones significaba que al gobierno federal no le quedaba suficiente para invertir en programas como atención dental y atención médica que son importantes para los canadienses de bajos ingresos.
Scheer acusó a Trudeau de no entender realmente el tema de la asequibilidad porque tenía un fondo fiduciario y que los recortes de impuestos conservadores marcarían una diferencia significativa para las personas que ganan menos de $ 47,000 al año.
Cambio climático
El tema final de la noche, moderado por Rosemary Barton de CBC, fue el medio ambiente y la energía.
Un miembro del público de Nuevo Brunswick dijo que Canadá estaba en medio de una crisis climática y que esta fue la última elección que tuvieron los canadienses antes de llegar al punto de inflexión. Quería que los líderes respondieran a la pregunta de qué harían en la lucha climática.
Scheer aprovechó la oportunidad para atacar a Trudeau por usar dos aviones de campaña y excusar esa elección comprando compensaciones de carbono. Trudeau respondió que Scheer no compró compensaciones de carbono porque no cree en el cambio climático.
Trudeau dijo que su gobierno había tomado medidas poniendo un precio a la contaminación en todo el país e implementando un plan que lleva a Canadá a tres cuartas partes de los objetivos de reducción de emisiones acordados en París.
“La elección de esta noche es muy clara entre dos partes que tienen puntos de vista muy diferentes sobre el cambio climático. El Sr. Scheer quiere romper el único plan serio sobre el cambio climático que Canadá haya tenido”, dijo Trudeau.
Scheer dijo que el plan de Trudeau ha dado reducciones de emisiones a algunos grandes productores, mientras que “los trabajadores, madres y padres que trabajan duro llevan a sus hijos a la escuela o conducen al trabajo tienen que pagar la peor parte” del impuesto al carbono.
Trudeau dijo que un plan real de cambio climático, para tener éxito, no solo debe ser ambicioso, sino factible.
May atacó a Trudeau por comprar el oleoducto Trans Mountain, argumentando que se garantiza que los objetivos de emisiones del gobierno no alcanzarán los objetivos de París. May fue más allá y dijo que esperaba que Trudeau no obtuviera la mayoría porque no haría los movimientos necesarios para combatir el cambio climático.
“No calificamos en una curva y decimos que debido a que un plan es menos ambicioso, es más factible si no cumple con el objetivo de mantener la temperatura promedio global en no más de 1.5 grados Celsius”, dijo.
Trudeau respondió que los políticos conservadores a nivel provincial habían sido elegidos primer ministro a raíz de las promesas de eliminar el impuesto federal al carbono y que se necesitaba un gobierno fuerte con un plan en Ottawa para oponerse a ellos.
“Estamos poniendo un precio a la contaminación en todo el país y estamos luchando contra aquellos primeros ministros conservadores que no quieren hacer su parte para combatir el cambio climático”, dijo Trudeau. “Reconocemos que la transición a la energía limpia no ocurrirá de la noche a la mañana”.
