París, 10 ene (EFE).- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, puso este lunes el foco del debate electoral en la seguridad al hacer balance de su acción en estos cinco años de mandato y apostar por nuevos métodos de actuación y organización.
Tras haber acaparado la actualidad la semana pasada con su presión a los no vacunados de coronavirus, Macron centró su discurso en esta ocasión en la protección de los franceses durante una visita oficial a Niza para la colocación de la primera piedra de una comisaría de policía que, de aquí a 2025, agrupará a 2.000 agentes en esa ciudad.
“Nuestro deber y nuestra vocación es seguir mejorando implacablemente las cosas y ser inflexibles” en la lucha contra el terrorismo, los feminicidios y el tráfico de droga, dijo en una declaración y en conversación con policías, magistrados y otros actores locales.
El formato, de corte pedagógico e informal y abierto a la intervención de los presentes, recordó al gran debate nacional que Macron emprendió en 2019 para recuperar el foco mediático que el movimiento contestatario de los “chalecos amarillos” le había arrebatado.
El jefe de Estado, elegido en 2017, todavía no ha oficializado su eventual candidatura a los comicios de abril, pero en declaraciones recientes sí ha avanzado que tiene ganas de presentarse y que se pronunciará claramente al respecto cuando la gestión de la crisis sanitaria le permita tomar una decisión.
Su visita se produce en un momento de polarización en torno a la futura entrada en vigor del pasaporte de vacunación, contra el que este sábado se manifestaron en toda Francia decenas de miles de personas (105.200, según el Ministerio del Interior).
Algunos diputados favorables a ese certificado, previsto para mediados de mes, han llegado a ser víctimas de violencia, como el diputado de la mayoría presidencial Stéphane Claireaux, representante de Saint Pierre et Miquelon, a quien el domingo lanzaron piedras contra su domicilio.
Macron se congratuló de que su mandato haya impulsado en estos cinco años la creación de 10.000 puestos en las fuerzas del orden y abogó entre otros puntos por “hacer trabajar mejor” a la policía y la justicia, con nuevas formas de cooperación y nuevos medios, como la inteligencia artificial.
El mandatario francés dijo querer duplicar de aquí a 2030 el número de policías en la calle gracias a cambios en materia organizativa y apostó también por la generalización de la presentación de denuncias a través de internet.
La oposición le reprocha un resultado desastroso en cuestión de seguridad y critica que este tipo de desplazamientos sean una campaña encubierta que aprovecha la visibilidad de su rol de presidente.
El diputado conservador Éric Ciotti, candidato a las primarias del partido Los Republicanos y actualmente en el equipo de la aspirante Valérie Pécresse, boicoteó por ejemplo el acto de hoy alegando precisamente que es un viaje de motivaciones electorales.
