Theodore Edgar McCarrick, cardenal y arzobispo emérito de Washington, fue expulsado por el papa Francisco
El papa Francisco ordenó que el cardenal y arzobispo emérito de Washington, Theodore McCarrick, permanezca alejado de sus funciones y recluido hasta que se aclaren las acusaciones de abuso sexual contra él en un juicio canónico.
La Santa Sede informó este sábado en un comunicado que el Papa recibió en la tarde de ayer una carta en la que el prelado estadounidense presentaba su renuncia como miembro del Colegio Cardenalicio.
Francisco aceptó la renuncia “y determinó la suspensión” de McCarrick “en el ejercicio de cualquier ministerio público, así como la obligación de que permanezca en una casa que le será asignada para una vida de oración y penitencia.
Así deberá vivir McCarrick “hasta que las acusaciones dirigidas contra él sean aclaradas por un proceso canónico regular”
El religioso, de 88 años, fue acusado de cometer abusos sexuales en una serie de episodios que se remontan al inicio de su carrera religiosa hace casi 50 años, cuando era sacerdote en la archidiócesis de Nueva York.
McCarrick siempre negó las acusaciones y mostró su sorpresa en un comunicado en el que señaló que había colaborado “plenamente” con una investigación del Vaticano.
La archidiócesis neoyorquina informó el 20 de junio que una comisión de investigación había determinado que las acusaciones contra el sacerdote “estaban fundamentadas y eran creíbles”.
Por eso, el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, siguiendo las instrucciones del Papa, ordenó que McCarrick abandonara el servicio público, según la nota.
Esta no es la primera vez que un cardenal estadounidense es afectado por acusaciones de abuso sexual, alegaciones que alcanzaron con mayor virulencia las archidiócesis de Boston y Nueva York.
El 20 de julio, un hombre rompió su silencio después de 40 años y aseguró al diario New York Times que el cardenal McCarrick había abusado de él cuando era menor de edad, una situación que supuestamente se había prolongado por dos decadas.
McCarrick fue nombrado cardenal por Juan Pablo II y participó en el cónclave de abril de 2005 en el que Benedicto XVI fue elegido pontífice.
