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Bogotá, 9 abr (EFE).- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, manifestó este domingo que está dispuesto a reunirse con los exjefes de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) que le enviaron una carta a finales de marzo pidiendo una audiencia para hablar sobre la ley que permitió su desmovilización.

El Presidente de Colombia, Gustavo Petro, en una imagen de archivo. EFE/ Matías Martín Campaya

“Antiguos jefes paramilitares que han pasado sus condenas dicen también públicamente que están dispuestos a reunirse conmigo. Yo creo que esa reunión debe darse”, dijo Petro durante un acto por la conmemoración del Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas.

Las AUC se desmovilizaron en 2006 tras un proceso de negociación con el Gobierno del entonces presidente colombiano Álvaro Uribe.

Como parte del acuerdo, los exparamilitares se acogieron a la Ley de Justicia y Paz, que contemplaba penas de máximo ocho años de cárcel a cambio de colaboración para esclarecer crímenes, pero algunos de los líderes perdieron esos beneficios.

En ese sentido, Petro aseguró este domingo que ve necesario que el Gobierno y los paramilitares beneficiados por esa ley “se reúnan para establecer en blanco y negro qué pasó con los bienes, evaluar qué pasó con la ley, en qué medida ese proceso de paz quedó trunco o se puede terminar y finiquitar”.

DECLARACIONES Y RESPUESTA

Todo comenzó el pasado 22 de marzo cuando Petro criticó la ley de justicia y paz porque considera que no se ha reparado a las víctimas y que los victimarios deberían contar la verdad al país.

“Era una ley de impunidad a los narcotraficantes armados de Colombia”, señaló entonces el mandatario y agregó que los paramilitares “creyeron que estaban haciendo un negocio” al combatir a las guerrillas y “quizás pensaban que de verdad estaban limpiando el país de lo que consideraban inferior, pero estaban aupados desde el poder”.

Siete días después, un grupo de 16 exjefes paramilitares, entre los que figura el excomandante de las AUC Salvatore Mancuso, pidieron una audiencia con el Gobierno para “exponer con lujo de detalles cuáles han sido” sus aportes “judiciales y extrajudiciales a la paz y reconciliación de Colombia”.

En la misiva dijeron que 4.902 desmovilizados de las AUC han sido asesinados desde 2006 y manifestaron que esperan que la paz total, el plan bandera del Gobierno de Petro, suponga “el fin de las violencias estructurales”.

“Consideramos que un debate público sobre los resultados de la desmovilización de las Autodefensas resulta pertinente y necesario (…) Hoy ya se puede hacer una balance cierto y objetivo, que atienda al llamado que usted nos hace”, dijeron los exjefes de las AUC.

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