KIEV, 09 MAYO.- La tensión aumenta en Ucrania mientras las fuerzas rusas lanzan una nueva oleada de ataques contra la infraestructura energética del país, generando preocupación por una posible ofensiva a gran escala en las próximas semanas. El presidente Volodímir Zelenski ha calificado el reciente bombardeo como “masivo”, con más de 50 misiles de crucero y drones dirigidos a la red eléctrica en siete regiones ucranianas.
El ataque ha causado daños en viviendas, la red ferroviaria y varias instalaciones energéticas, incluyendo centrales térmicas y subestaciones eléctricas. La región de Leópolis, en el oeste del país y lejos de la línea del frente, también ha sido afectada, lo que demuestra la amplitud del ataque ruso.
Las autoridades ucranianas afirman que las defensas aéreas lograron derribar la mayoría de los misiles y drones, pero el daño infligido a la infraestructura energética es significativo. Este ha sido el quinto ataque de este tipo en las últimas seis semanas, y desde el inicio de la invasión a gran escala en febrero de 2022, las instalaciones energéticas de Ucrania han sido blanco de casi 180 ataques, causando víctimas entre los trabajadores del sector.
El objetivo de Rusia con estos ataques es claro: debilitar la capacidad industrial y militar de Ucrania, minar la moral de la población y agotar las defensas aéreas del país. El presidente Putin ha justificado estos bombardeos como una respuesta a los ataques ucranianos contra refinerías de petróleo rusas.
A pesar de la frecuencia de los bombardeos, en las últimas semanas se ha observado una disminución en su regularidad. Esto ha generado sospechas de que Rusia está acumulando recursos para una posible ofensiva a gran escala en el campo de batalla. La línea del frente se ha mantenido relativamente estable, pero Rusia ha logrado avances en algunas zonas, mientras Ucrania enfrenta la falta de efectivos y la escasez de armas.
El presidente Zelenski ha comparado la lucha actual de Ucrania con la Segunda Guerra Mundial, recordando el sacrificio de quienes lucharon contra el nazismo y destacando la resistencia del pueblo ucraniano ante la agresión rusa.
La situación en Ucrania es crítica, con una escalada de ataques rusos y temores de una nueva ofensiva. La comunidad internacional observa con preocupación el desarrollo de los acontecimientos, mientras Ucrania se prepara para lo que podría ser una nueva fase de la guerra.
