Palm Beach (EE.UU.), 31 mar (EFE).- Menos de diez seguidores del expresidente Donald Trump estaban este viernes concentrados en los alrededores de Mar-a-Lago, su mansión y club privado en Palm Beach (Florida) para expresarle su apoyo tras haber sido imputado de cargos penales.
Los seguidores, siete según constató EFE, llevaban pancartas y banderas y estaban situados cerca del puente que une con el continente la zona de Palm Beach donde está Mar-a-Lago.
Según comprobó EFE, el avión privado de Trump se encuentra estacionado en el Aeropuerto Internacional de Palm Beach, pero no hay otro indicio de que el expresidente esté en su domicilio legal.
El jueves después de que se anunciara que un gran jurado neoyorquino imputó penalmente a Trump en el caso por los pagos ilegales presuntamente hechos a la actriz porno Stormy Daniels en 2016, una treintena de personas salieron a las calles de Palm Beach en rechazo a la decisión judicial y fueron captadas por las cámaras televisivas.
“Estoy seguro de que esta cacería de brujas se volverá en contra de Biden enormemente. El pueblo americano se ha dado cuenta de lo que la izquierda radical Demócrata está haciendo. Todos pueden verlo”, dijo Trump en un comunicado este jueves.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo que el estado no atenderá una petición para extraditar a Trump y considero “antiestadounidense” la imputación.
Hace solo unos días DeSantis, que no ha desvelado si competirá por la nominación republicana en 2024, aunque a juzgar por los ataques se cruza desde hace unos meses con Trump y otros indicios se diría que sí, dijo que no iba a entrar en lo que definió como un “circo fabricado, en una alusión al caso de Trump por los presuntos pagos ilegales.
En defensa de Trump han salido el senador republicano Rick Scott, exgobernador de Florida, y los representantes Carlos Jiménez y Matt Gaetz, entre otros.
Este último señaló: “Fiscales federales tuvieron los mismos datos del mismo caso y no llevaron a estos cargos así que ahora que es un fiscal que no es federal, que es estatal de Nueva York pueda traer estos cargos otra vez, esto es un paso muy peligroso para esta nación”.
