Riad/Saná, 20 mar (EFE).- Un ataque con drones de los rebeldes chiíes hutíes del Yemen la pasada noche, en la que lanzaron operaciones contra media docena de instalaciones estratégicas del sur de Arabia Saudí, alcanzó una refinería en Yanbu y afectó a su producción de petróleo, informó este domingo Riad.
El ataque, llevado a cabo con drones, “provocó una disminución temporal en el nivel de producción de la refinería”, aseguró una fuente sin identificar del Ministerio de Energía en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias saudí, SPA.
Antes de este anuncio, Riad había informado de otros cinco operaciones con aviones no tripulados y misiles contras instalaciones en el suroeste del país, cerca de la frontera con Yemen, incluida una plata de gas natural también en Yanbu, en ninguna de las cuales se ha informado de víctimas.
Los otros objetivos fueron una estación de distribución de la petrolera Aramco en Yizan y una planta desalinizadora en Shaqiq, contra los que se emplearon misiles de crucero de fabricación iraní, así como una estación de transmisión de energía en Dhahran al Yanub y una estación de servicio de la Compañía de Gas e Industrialización en Jamis Mushait.
Hasta el momento las autoridades saudíes han asegurado que ninguna de estas acciones ha provocado víctimas mortales aunque sí “algunos daños materiales en instalaciones, vehículos civiles y viviendas”.
Según el portavoz de la coalición militar liderada por Arabia Saudí que interviene en el Yemen, el general saudí Turki al Maliki, las defensas antiaéreas saudíes interceptaron y destruyeron en el aire un misil balístico y nueve drones con trampa explosiva lanzados hacia las ciudades de Yizan, Jamis Mushait, Taif, Yanbu y Dhahran el Yanub.
El portavoz militar de los insurgentes yemeníes, Yahya Sarea, reivindicó la autoría de los ataques en un comunicado publicado en su cuenta en Twitter que dijo que iban dirigidos contra “varias instalaciones vitales de Aramco en la capital del enemigo saudí, Riad, y en Yanbu”, así como otros “objetivos vitales en Abha, Jamis Mushait, Yizan y Samta y Dhahran al Yanub.
La coalición árabe encabezada por Arabia Saudí, que apoya al gobierno internacionalmente reconocido frente a los insurgentes hutíes, lamentó en un comunicado difundido por SPA que “estos ataques hostiles son un rechazo a los esfuerzos e iniciativas de paz”.
Se refería a una convocatoria hecha esta semana por el Consejo de Coordinación del Golfo (CCG) a todas las partes beligerantes yemeníes a unas conversaciones en Riad, a partir del próximo 29 de marzo, para diseñar una hoja de ruta hacia el fin de la guerra.
Los hutíes no han respondido a esta invitación formal, pero ya habían adelantado que rechazarían acudir a un diálogo en la capital de Arabia Saudí, dado su papel en la contienda y el bloqueo al que somete al espacio aéreo y el transporte marítimo hacia las zonas del país que ellos controlan.
