Ginebra, 6 Mayo.- La orden de evacuación emitida por Israel para la zona oriental de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, ha generado una creciente preocupación por una posible incursión israelí en la zona y el riesgo de una catástrofe humanitaria. El Consejo Noruego de Refugiados (NRC) ha alertado sobre la posibilidad de “atrocidades masivas” contra los 1,4 millones de desplazados que se encuentran hacinados en la zona.
“La ofensiva militar de Israel en Rafah podría conducir a la fase más mortífera de este conflicto, infligiendo un sufrimiento espantoso a aproximadamente 1,4 millones de civiles desplazados en la zona”, advirtió Jan Egeland, secretario general del NRC y antiguo jefe humanitario de Naciones Unidas.
La situación en Rafah es crítica, con una alta concentración de población desplazada que vive en condiciones precarias y con acceso limitado a alimentos, agua potable, atención médica y refugio. Una incursión militar israelí en la zona podría tener consecuencias devastadoras para la población civil.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la situación en Gaza y ha pedido a Israel que evite una escalada de la violencia.
Es necesario que se tomen medidas urgentes para proteger a la población civil de Gaza y garantizar el acceso a la ayuda humanitaria.
