EDMONTON, 02 NOVIEMBRE.- Los políticos de Alberta advierten al gobierno federal liberal que los límites a las emisiones de gases de efecto invernadero del petróleo y el gas deberán establecerse en consulta con la provincia.
Tanto el primer ministro Jason Kenney como la nueva líder de la oposición demócrata Rachel Notley dicen que Alberta tiene que estar en la mesa cuando se discutan los límites de emisiones anunciados el lunes por el primer ministro Justin Trudeau.
“No sé por qué harían un anuncio como este sin consultar con la provincia que en realidad posee la abrumadora mayoría de las reservas de petróleo y gas de Canadá”, dijo Kenney.
Notley señaló que el petróleo y el gas no son la única parte de la economía que emite dióxido de carbono.
“Si el gobierno federal va a hablar de límites de emisiones para la industria del petróleo y el gas, debe hablar de límites de emisiones para todos los sectores”, dijo. “El gobierno de Alberta debe estar en la mesa para abogar por el mejor trato para Alberta”.
El lunes, Trudeau dijo en la conferencia climática global que tiene lugar en Glasgow, Escocia, que Canadá impondría un límite estricto a las emisiones del sector, la fuente de aproximadamente una cuarta parte de todos los gases de efecto invernadero de Canadá.
Trudeau dijo que el gobierno ahora está cumpliendo su promesa electoral de limitar esas emisiones. El compromiso vería que las emisiones se limitarían a los niveles actuales y se reducirían cada cinco años hasta que sean neutrales en carbono para 2050.
“Limitaremos las emisiones del sector de petróleo y gas hoy y nos aseguraremos de que disminuyan mañana al ritmo y la escala necesarios para llegar a cero neto para 2050”, dijo Trudeau.
El ministro de Medio Ambiente y Cambio Climático, Steven Guilbeault, y el ministro de Recursos Naturales, Jonathan Wilkinson, pidieron formalmente el lunes a la junta asesora de cero neto del gobierno que los ayudara a lograr este objetivo.
Kenney dijo que su gobierno no necesariamente se opone a un tope. Ya existe un límite de emisiones de 100 megatoneladas para las arenas bituminosas, aunque ese límite permite la expansión y nunca se ha alcanzado.
“Necesitamos saber cuál es el límite. Estamos dispuestos a discutir con ellos el límite propuesto de 100 megatoneladas”.
Kenney dijo que una mejor medida desde Ottawa sería una transferencia de $ 32 mil millones de dólares de impuestos para ayudar a la industria a pagar por la captura, utilización y almacenamiento de carbono, instalaciones que recolectarían carbono y lo bombearían bajo tierra para su almacenamiento a largo plazo. Tales instalaciones ya existen en Alberta.
Tim McMillan, de la Asociación Canadiense de Productores de Petróleo, dijo en un comunicado que tales políticas pueden ayudar al petróleo y el gas canadienses a reducir las emisiones globales de carbono.
“El mundo necesitará un mayor acceso a gas natural y petróleo de menor emisión”, dijo. “Canadá, en el entorno político adecuado, puede posicionarnos como un proveedor global preferido”.
Estudios recientes han sugerido que Canadá ya es el mayor subsidiario de petróleo y gas en el G20. Los liberales federales y las agencias federales se han comprometido a reducir esos subsidios.
Chris Severson-Baker, del Pembina Institute, un grupo de expertos en energía limpia, dijo que es poco probable que la captura de carbono juegue un papel tan importante en la reducción de emisiones como le gustaría a Kenney.
“Existe un papel para cierto grado de apoyo público a la captura de carbono”, dijo. “Creo que Jason Kenney y las empresas están hablando de eso y mucho más dinero”.
Severson − Baker dijo que se aplicarán otras regulaciones federales en toda la economía de Canadá. Pero un límite de petróleo y gas está justificado porque ese es el sector donde las emisiones están aumentando.
“Este es el sector en el que (Trudeau) debe centrarse”.
Este informe de The Canadian Press se publicó por primera vez el 1 de noviembre de 2021.
