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Madrid, 25 de abril.- Manos Limpias, el sindicato de funcionarios creado por Miguel Bernad en 1995, ha vuelto a la palestra tras la denuncia presentada contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Este sindicato, con una representación mínima en las administraciones, acumula un largo historial de denuncias y querellas, la mayoría archivadas, dirigidas contra figuras políticas de renombre.

Orígenes y trayectoria

Miguel Bernad, político de extrema derecha en la década de 1980, fundó Manos Limpias bajo la bandera de la lucha contra la corrupción. Sin embargo, su actividad se ha caracterizado por la presentación de denuncias y querellas polémicas, muchas de ellas consideradas infundadas o con motivaciones políticas.

Condena por extorsión

En 2016, Bernad fue detenido junto al presidente de Ausbanc, Luis Pineda, por extorsionar a bancos y empresas a cambio de retirar acusaciones en procesos judiciales. Aunque ambos fueron condenados por la Audiencia Nacional, el Tribunal Supremo anuló las condenas en 2019, al considerar que las acciones, aunque éticamente censurables, no constituían delito de extorsión.

Denuncias contra figuras políticas

Manos Limpias ha presentado denuncias contra figuras políticas como Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Pere Aragonès, todas ellas archivadas o rechazadas por los tribunales. Entre las denuncias archivadas se encuentran la relativa a la ley de amnistía, el falso informe PISA sobre la financiación de Podemos y la acusación contra Gabriel Rufián por revelación de secretos oficiales.

Actividad reciente

Manos Limpias está personado en la causa por presuntos delitos de corrupción en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y ha visto archivada recientemente la denuncia contra la revista Mongolia por una portada satírica.

Denuncia contra Begoña Gómez

La última acción judicial de Manos Limpias ha sido la denuncia contra Begoña Gómez por tráfico de influencias, a partir de noticias publicadas en medios de comunicación. El juez del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid ha abierto diligencias de investigación para esclarecer los hechos.

Manos Limpias, a pesar de su exigua representación, ha logrado generar controversia y acaparar titulares con sus denuncias y querellas. Su actividad judicial, a menudo cuestionada por su falta de fundamento o por su sesgo político, ha puesto en el punto de mira a este sindicato con un largo historial de polémicas.

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