Bogotá, 01 MAYO.- El presidente colombiano, Gustavo Petro, ha denunciado el robo de una gran cantidad de armas y municiones en dos bases militares del país. Según las inspecciones realizadas, faltan más de un millón de proyectiles, incluyendo misiles, granadas y cartuchos de diversos calibres.
Petro señaló que la única explicación para esta situación es la existencia de redes de tráfico de armas integradas por miembros de las Fuerzas Militares y civiles. El presidente detalló que las inspecciones se llevaron a cabo en el Fuerte de Tolemaida y en la base de la Brigada 10 del Ejército, donde se detectó la falta de material bélico de gran envergadura.
Entre los elementos desaparecidos se encuentran:
Fuerte de Tolemaida: 746 granadas calibre 81 mm, 3.712 granadas de mano M-26, 2.880 granadas de 40 mm, 1.590 granadas de 60 mm, 797 granadas de 40 mm eslabonadas, municiones de diversos calibres y más.
Base de la Brigada 10: Dos misiles Spike, 37 misiles Nimrod, 550 cohetes RPG, granadas de diversos calibres, cargas antitanque, municiones de diversos calibres y más.
El presidente Petro manifestó su preocupación por el destino de estas armas, que podrían estar en manos de grupos armados ilegales en Colombia o incluso alimentar conflictos en otros países, como Haití, que se encuentra a poca distancia de la base de la Brigada 10.
Petro lamentó que estas mismas municiones puedan ser utilizadas para herir o matar a miembros de las Fuerzas Militares y anunció que se realizarán inspecciones en otras bases del país para desmantelar estas redes de tráfico de armas.
La denuncia del presidente Petro pone de manifiesto un grave problema de seguridad y corrupción dentro de las Fuerzas Militares colombianas. La investigación sobre el robo de armas y municiones es crucial para determinar el alcance de las redes de tráfico y evitar que este material bélico caiga en las manos equivocadas.
