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Santiago de Chile, 14 feb (EFE).- La Justicia militar chilena dejó en prisión preventiva a Óscar Izurieta, excomandante en jefe del Ejército, la máxima autoridad de la institución, por malversación de 6,3 millones de pesos (unos 7.700 dólares), mientras estuvo en el cargo, entre 2006 y 2010.

La magistrada de la Corte Marcial Romy Rutherford, que investiga desde 2018 los fraudes al interior de las Fuerzas Armadas, lo acusó también de falsificación de documento público.

El exuniformado, que lleva desde el pasado jueves en calidad de detenido por el supuesto desvío de millonarias sumas de dinero provenientes de los gastos reservados del Ejército, ingresará en prisión en el Batallón de Policía Militar de Peñalolén, al sureste de la capital.

Asimismo, la jueza ordenó el embargo de bienes por un monto total de 6,5 millones de pesos (casi 8.000 dólares).

Según el Poder Judicial, Izurieta habría falsificado su documento de identificación militar en rendiciones de cuenta y declaraciones juradas respecto de los gastos reservados de 2006 a 2009.

En paralelo, habría perpetrado un perjuicio al fisco de 3,9 millones de pesos de la época, que según las estimaciones de la magistrada, que consideró el valor promedio anual del dólar, equivale a la suma de 6,3 millones de dólares actuales.

La formalización de Izurieta se suma a otros episodios judiciales protagonizados por altos mandos de Fuerzas Armadas y de Orden en Chile, entre ellos los de los excomandantes en jefe del Ejército Juan Miguel Fuente-Alba (2010-2014) y Humberto Oviedo (2014-2018), procesados por lavado de dinero, fraude al fisco y mal uso de gastos reservados.

Fuente-Alba, más conocido como “El señor de los anillos” por su supuesta afición a los autos de lujo marca “Audi”, fue proceso por un monto de más de 3,5 millones de pesos (4.300 dólares), y Oviedo, por una suma superior a los 60 millones de pesos (73.800 dólares).

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