OTTAWA, 17 FEBRERO.- El oficial de presupuesto parlamentario advierte que la propiedad de una vivienda se ha vuelto aún menos asequible durante la pandemia para el comprador promedio, a quien le puede resultar aún más difícil ingresar al mercado a menos que los precios bajen.
Los precios de la vivienda estaban en un aumento meteórico antes de la pandemia de COVID-19 hace dos años, y se han visto impulsados aún más por las tasas de interés bajísimas, la demanda de más espacio y la oferta que no puede mantenerse.
El informe del oficial de presupuesto Yves Giroux dice que los precios de la vivienda en la mayoría de las principales ciudades podrían haberse considerado asequibles a principios de 2015, en función de los costos, pero también de la capacidad de endeudamiento de los compradores.
La oficina de Giroux estima que los precios de la vivienda en Toronto, Hamilton y Ottawa estaban más de un 50 por ciento por encima de un nivel asequible a fines de 2021, e inasequibles por un margen menor en Vancouver y Montreal.
Él dice que a la persona con ingresos promedio le resultará cada vez más difícil pagar una casa en el futuro a menos que los precios bajen o los salarios suban.
Giroux también advierte que aquellos que compraron casas recientemente son más vulnerables al aumento de las tasas de interés y podrían verse incapaces de hacer frente a un impacto repentino como la pérdida del trabajo.
Su informe señaló que las cargas de deuda en Toronto, Vancouver, Victoria y Hamilton eran lo suficientemente altas como para que los hogares pudieran considerarse financieramente vulnerables, lo que significa que cualquier pérdida de ingresos los haría menos propensos a mantenerse al día con los pagos de la hipoteca.
Los propietarios de viviendas en mejores condiciones financieras podrán manejar tasas más altas, dijo, pero Giroux dijo que aquellos con ingresos promedio que compraron casas recientemente “podrían tener un viaje difícil” financieramente.
El informe publicado el jueves se suma a la evidencia ante los miembros del parlamento que, dijo Giroux, han acudido repetidamente a su oficina con preguntas sobre el costo de la vivienda.
El informe de Giroux dice que a fines del año pasado, el precio promedio de la vivienda a nivel nacional era de $811,700, un aumento del 43 por ciento de los $565,800 registrados en diciembre de 2019, unos meses antes de que la pandemia azotara al país.
La cifra de diciembre de 2021 también fue casi el doble del precio promedio de $413,000 en enero de 2015.
Las tasas de interés bajas, impulsadas por el banco central para mantener la economía en marcha, y los apoyos federales que pusieron un piso financiero para los hogares ayudaron a impulsar los precios al alza en los últimos dos años.
Giroux dijo que las ganancias en la capacidad de endeudamiento que permitieron las circunstancias financieras fueron superadas con creces por los precios de las viviendas en varias ciudades y, de hecho, ampliaron la brecha de asequibilidad.
Las tasas de las hipotecas fijas han subido debido a las expectativas de que el Banco de Canadá comience a subir su tasa que marca tendencia el próximo mes. Si, y cuando, eso suceda, las hipotecas de tasa variable comenzarán a subir a medida que el banco central busca enfriar los mercados sobrecalentados.
Giroux dijo que el aumento de las tasas probablemente compensará cualquier aumento en los ingresos del hogar para el asalariado promedio, lo que significa que su capacidad para pedir prestado y, por lo tanto, pagar una casa, se mantendrá relativamente estable.
Los precios tendrían que bajar para que la propiedad de la vivienda sea más asequible para el comprador promedio, dijo Giroux. Una posible vía es aumentar la oferta, que según el informe de Giroux no se mantuvo al día con el auge de la población entre 2015 y 2019.
El gobierno federal ha buscado aumentar la oferta de viviendas, prometiendo financiamiento a las ciudades para ayudar a acelerar los plazos de desarrollo y las aprobaciones.
El jueves, la ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, ofreció fondos de tránsito para ayudar a las ciudades a manejar la escasez de ingresos, pero exigió a las provincias y ciudades acelerar los planes de vivienda como requisito de efectivo.
El crítico de vivienda conservador Matt Jeneroux dijo que los esfuerzos de los liberales hasta ahora no han podido cerrar la brecha de asequibilidad para los compradores de vivienda y argumentó que los planes del gobierno no abordarían el problema.
Este informe de The Canadian Press se publicó por primera vez el 17 de febrero de 2022.
