Publicidad

Denver (EE.UU.), 29 abr (EFE).- El alcalde de Barranquilla (Colombia), Jaime Pumarejo, dijo este viernes que su ciudad está “dando la mano” a los migrantes con “lo poco que tiene”, por lo que pidió a organismos internacionales préstamos más favorables que faciliten la acogida de estas personas.

“Hoy algunos tienen problemas y se les da la mano con lo poco que tenemos. Hemos intentado integrarlos a nuestra comunidad y al sistema de empleo”, explicó en declaraciones a EFE durante la primera Cumbre de las Ciudades de Américas, celebrada en Denver (Colorado, EE.UU.).

En algunos foros de esta cumbre, que reunió a más de 200 alcaldes del continente, se puso como ejemplo los programas de acogida de migrantes venezolanos que implementan ciudades como Bogotá o Barranquilla.

El alcalde dijo que la crisis migratoria regional hay que abordarla desde la “empatía” y “entendiendo que todos somos seres humanos”.

El plan de Barranquilla pasa por la integración de los migrantes a la economía local, de modo que no se entiende “como un problema de gasto” sino como una inversión para el empleo y el emprendimiento, dijo Pumarejo.

Sin embargo, advirtió de que las ciudades atraviesan dificultades de acceso a recursos para enfrentar la crisis migratoria y medioambiental, por lo que pidió a los organismos y bancos de desarrollo regionales que “abran la llave de la financiación” con deudas a largo plazo y tasas de interés bajas.

“No quiere decir que nos regalen la plata. Pero que nos la presten con condiciones favorables para que podamos participar en la solución (de las crisis)”, declaró.

La Cumbre de las Ciudades de las Américas es un nuevo foro regional creado por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, durante la Cumbre de las Américas de 2022 en Los Ángeles.

En su primera edición, celebrada en Denver este jueves y viernes, acogió a más de 200 alcaldes del continente, como los de Ciudad de México, Bogotá, Miami, Río de Janeiro, Montevideo y Santo Domingo.

Durante este foro, Estados Unidos anunció que destinará un millón de dólares a ayudar a las ciudades de América Latina y el Caribe a proteger a los migrantes vulnerables ante el impacto de la crisis climática.

Publicidad