Buenos Aires, 5 feb (EFE).- La Iglesia Católica argentina pidió este lunes al Gobierno de Javier Milei que mantenga la ayuda alimentaria a los comedores sociales que asisten a los más necesitados “sin dilación”, en medio de las denuncias de organizaciones de que hay retraso en esas entregas.
En un comunicado publicado este lunes en su web, bajo el título ‘El pedido del pan de cada día es un clamor de justicia’, la Conferencia Episcopal Argentina reclama al Ejecutivo que siga “brindando asistencia alimentaria” a los comedores sociales, “sin interrumpir” dicha actividad, al tiempo que “los puede auditar” y que “den cuenta de su transparencia”.
“De este modo, contribuir a optimizar la ayuda sin descuidar a nadie”, argumenta el texto.
La institución pide al estado nacional, provincial y municipal “que nadie se quede sin el pan de cada día” y, por ello, insiste en que “los comedores comunitarios, de parroquias, Iglesias evangélicas y de movimientos populares deben recibir ayuda sin dilación”.
El Ejecutivo de Milei anunció recientemente la auditoría a los comedores registrados para luchar contra la “discrecionalidad, compras que no se entienden bien y cuestiones que estamos dispuestos a cambiar”, explicó días atrás el portavoz presidencial, Manuel Adorni.
“Va a haber un método innovador para que las ayudas lleguen a quienes correspondan”, agregó, sin especificar más detalles, aunque sí reiteró la lucha del Gobierno por “evitar que existan negocios con la pobreza”.
En el ámbito de esas protestas, la ministra de Capital Humano -cartera de la que depende la asistencia social-, Sandra Pettovello, dijo recientemente que no iba a hablar con “los referentes” que acudieran hasta ella, sino que atendería “uno por uno a la gente que tiene hambre”, anotando su nombre y DNI.
Esta afirmación ha llevado este lunes a numerosas personas a hacer fila ante la sede de su cartera.
En su texto de este lunes, la Conferencia Episcopal cita al Antiguo Testamento para recordar: “No apartes tu rostro del pobre”. Y reclama que, en Argentina, “nadie debería pasar hambre, ya que es una tierra bendita de pan”.
“La inflación desde hace años crece día a día y pega fuertemente en el precio de los alimentos. Lo siente claramente la clase media trabajadora, los jubilados y aquellos que no ven crecer sus salarios. También todo el universo de la economía popular, donde prácticamente se trabaja sin derechos”, detalla.
Por ello, solicita la institución, “es necesario anticiparse para que esta situación no profundice la crisis alimentaria” y cita al papa Francisco: “Ante una crisis no son suficientes los paradigmas tecnocráticos, sean estadocéntricos, sean mercadocéntricos, es necesaria la comunidad”.
Este texto se publica precisamente el día en que Milei emprende una gira que lo llevará a Israel, Italia y El Vaticano, donde será recibido en audiencia por el sumo pontífice tras las amplias diferencias expresadas entre ambos.
