George Herbert Walker Bush , el presidente número 41 de Estados Unidos y el hombre en el centro de una de las dinastías políticas más importantes de Estados Unidos, murió la noche del viernes. Tenía 94 años.
Los arreglos funerales se harán tan pronto como sea “práctico”, anunció su oficina. Pasó a las 10:10 pm hora central.
“Estados Unidos ha perdido a un patriota y humilde servidor en George Herbert Walker Bush . Mientras nuestros corazones están pesados hoy, también están llenos de gratitud “, dijo el ex presidente Barack Obama.
Conocido entre su familia y amigos más cercanos como un hombre tranquilo y gentil que preferiría hablar más que pelear, Bush se encontraba entre los héroes de guerra más condecorados de la nación.
En un momento dado, el miembro más joven de la Marina de los Estados Unidos, realizó 58 misiones de combate durante la Segunda Guerra Mundial. Pero su huella en la historia de la nación fue hecha igualmente por una exaltada carrera en la política que abarcó la segunda mitad del siglo XX.
(Foto AP / Wilfredo Lee) ** ARCHIVO **
La carrera de Bush en la política comenzó con su elección como presidente del Partido Republicano del Condado de Harris, Texas. Se incorporó a la Cámara de Representantes de los EE. UU. En 1966 y más tarde se desempeñó como Embajador de los EE. UU.
Ante las Naciones Unidas, Presidente del Comité Nacional Republicano, Jefe de Relaciones con los EE. UU. En China, Director de la Agencia Central de Inteligencia. Desde 1981 hasta 1989, se desempeñó durante dos mandatos como vicepresidente del presidente Ronald Reagan.
El primer vicepresidente en funciones desde 1837 en ascender a la presidencia, el Sr. Bush fue elegido para el cargo en la Oficina Oval en 1989.
Como miembro de un pequeño cuadro de los Guerreros Fríos de más alto nivel de la nación, se le conocía por una obsesión con los asuntos mundiales, así como por el sello de gestión estratégica que había dejado en la CIA. Inteligencia.”
En su forma, probablemente será recordado por los logros en política exterior logrados durante sus años en la Casa Blanca, ambos como vicepresidente durante ocho años para Ronald Reagan y más tarde como presidente durante cuatro años.
“Durante su término, terminó la Guerra Fría; la amenaza de una guerra nuclear se redujo drásticamente; [y] la Unión Soviética dejó de existir ”, afirma la biografía oficial en el sitio web de la Biblioteca y Museo Presidencial de George Bush en College Station, Texas.
Principalmente, se le atribuye al Sr. Bush el haber concebido y luego haber sido silencioso ante el fondo de un delicado pero poderoso esfuerzo diplomático que unió a los líderes árabes y a las Naciones Unidas para apoyar la coalición militar sin precedentes de 32 naciones que definió la Guerra del Golfo de 1991.
La campaña terrestre de seis semanas es considerada como una de las más suaves de la historia de los Estados Unidos, ya que resultó en solo 141 bajas aliadas y sentó un precedente de lo que luego se conoció como una estrategia de emplear “fuerza abrumadora”. El esfuerzo terminó con una liberación expedita. de Kuwait de sus invasores militares iraquíes junto con la destrucción estratégica del alijo de armas de destrucción masiva de Saddam Hussein.
Sin embargo, lejos del centro de atención, el Sr. Bush creó una atmósfera humilde dentro de la Casa Blanca. Se le recuerda con cariño como un presidente que disfrutó de la autocrítica hasta el punto de que una vez invitó a Dana Carvey, la comediante de Nueva York que había creado una carrera para hacerse pasar por el señor Bush y quedarse en el dormitorio de Lincoln.
La reputación de Bush como constructor de coaliciones también se extendió a sus tratos con Washington, a pesar de haber sido el segundo presidente estadounidense en cumplir un mandato completo sin control del partido en ninguna de las cámaras del Congreso.
Firmó el proyecto de ley permitiendo un aumento en los impuestos. Si bien luego dijo que lamentó la decisión y que lo marcó políticamente en su fallida carrera para la reelección en 1992, el desarrollo estableció un tono de cooperación bipartidista que muchos creen que ayudó a configurar las estrategias políticas internas que luego adoptó Clinton a través del boom económico de finales del siglo XX. -1990s.
El único término del Sr. Bush también vio la firma de leyes históricas de derechos civiles y ambientales en la Ley de Estadounidenses con Discapacidades y las leyes de Aire Limpio. Y, luchó por y negoció el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Aunque controvertido en su momento, desde entonces, el acto ha marcado un tremendo crecimiento económico y los vínculos entre Estados Unidos, Canadá y México, una alianza de tres vías que ahora se considera el bloque económico de naciones más fuerte del mundo.
El Sr. Bush también está introduciendo una mayor financiación para programas de educación y resistencia a las drogas sin precedentes en las escuelas públicas de los Estados Unidos y, entre otras cosas, se le atribuye la expansión del uso de la pena de muerte para delitos especialmente graves, proporcionando a la oficina del presidente un elemento de línea Veto y cambio del sistema de bienestar para exigir más responsabilidad por parte de los destinatarios.
Centro de una dinastia
Bush fue uno de los dos presidentes estadounidenses que vieron a su propio hijo ascender a la presidencia. George W. Bush, quien se desempeñó en la Oficina Oval por dos términos desde 2001 hasta 2009, se encuentra ahora entre Jimmy Carter, Bill Clinton y Barack Obama como los cuatro ex presidentes vivos de Estados Unidos.
Uno de los otros hijos de Bush , Jeb, se desempeñó como gobernador de Florida desde 1999 hasta 2007. Además de sus hijos políticos, a Bush le sobreviven otros tres hijos: Neil Mallon Bush, Marvin Pierce Bush y Dorothy Bush. Koch. Una segunda hija, Pauline, nació en 1949 pero murió de leucemia en 1953.
También le sobreviven 17 nietos y un bisnieto.
Después de servir como presidente, el Sr. Bush asumió un papel considerado por muchos como “abuelo”, no solo para una familia política grande y poderosa, sino de alguna manera para la misma nación con Barbara, a menudo considerada con cariño como la abuela de Estados Unidos.
Además de aparecer como un accesorio sabio en el contexto de la presidencia de su hijo, y en las excursiones al complejo de la familia en Kennebunkport, Me., Disfrutó de su tiempo de jubilación. Llegó a los titulares haciendo paracaidismo en al menos tres de sus cumpleaños.
El Sr. Bush también desempeñó un papel admirable y caritativo post-presidencial al ayudar a recaudar cientos de millones de dólares para la caridad, quizás más notablemente cuando su hijo presidencial lo llamó a trabajar con el ex presidente Clinton para recaudar fondos para las víctimas del tsunami asiático. más tarde el huracán Katrina en el sureste de los Estados Unidos.
Los primeros años
Nacido el 12 de junio de 1924 en Milton, Ma., Bush pasó un tiempo como niño en Greenwich, Connecticut, antes de asistir a la escuela secundaria en la Academia Phillips en Andover, Ma.
Como hijo de Prescott Sheldon Bush, un reconocido banquero de Wall Street y senador por dos períodos de Connecticut, se convirtió rápidamente en un líder estudiantil, convirtiéndose en capitán de los equipos de béisbol y fútbol de Andover y presidente de su clase de último año. Al graduarse, fue aceptado en Yale, pero a la edad de 18 años aplazó su inscripción para poder unirse a la Armada.
Cuando fue comisionado oficialmente en junio de 1943, Bush era el aviador naval más joven hasta la fecha. Sirvió en un escuadrón de torpedos que participó en la batalla del Mar de Filipinas, uno de los más grandes de la Segunda Guerra Mundial, y luego pilotó un avión Avenger que fue derribado de la isla de Chi Chi Jima.
Al regresar de la guerra, se inscribió en Yale, donde se dice que siguió los pasos de su padre hacia la influyente y secreta sociedad “Skull and Bones”. Jugó en la primera base en el equipo de béisbol de Yale en un momento en el que, según se informa, se reunió con Babe Ruth antes de un juego y se graduó en economía, graduándose Phi Beta Kappa en 1948.
Luego, él y Barbara se mudaron al sur, al oeste de Texas, donde Bush se abrió camino en el negocio del petróleo antes de ingresar a la política.
Los recuerdos en su museo presidencial muestran la cercanía de la relación que Bush también mantuvo a través de los años con su madre, Dorothy Walker Bush. Si bien rara vez la cruzó, se dice que solo en su retiro pudo haber cumplido con su regla de oro contra el alarde.
Si su hijo era un deportista estrella en la escuela, un héroe de guerra de buena fe o el presidente que ganó la Guerra del Golfo, su madre lo regañaría por “showboating”.
Según se informa, incluso llamó durante su campaña presidencial de 1988 para quejarse: “Estás hablando demasiado de ti mismo”.
