MONTREAL, 05 ENERO.- El gobierno de Quebec, que estima que el 30% de la población ya no escucha las instrucciones sanitarias que intenta imponer, anunciará este miércoles un encierro más estricto que podría durar hasta el 8 de febrero, dijeron fuentes a Radio- Canadá.
Con el fin de romper la cadena de transmisión comunitaria de COVID-19 y ralentizar la progresión de nuevos casos y hospitalizaciones, la salud pública de Quebec también ha recomendado que el gobierno implemente un toque de queda en la provincia.
Según han indicado fuentes a Radio-Canadá, el gobierno de François Legault quisiera sacudir el imaginario colectivo
, sin llegar a imponer un toque de queda real. Quebec quiere que la gente se quede en casa de 7:30 p.m. a 6 a.m. En particular, el gobierno podría obligar a las tiendas de comestibles a cerrar a las 7 p.m., dijeron estas fuentes.
Dependiendo del escenario de confinamiento previsto, el gobierno podría posponer el regreso a clase de los estudiantes, inicialmente previsto para el 11 de enero, una semana en la escuela primaria y dos semanas en la secundaria. Sin embargo, esta medida todavía parece estar sujeta a cambios, especialmente para los estudiantes de la escuela primaria.
Sin embargo, las guarderías y los servicios de guardería permanecerán abiertos.
Las actividades al aire libre solo se permitirán respetando una burbuja familiar.
Además, la construcción y la fabricación tendrán que ceñirse a las actividades que se consideren esenciales, pero que ellas mismas podrían determinar cuál es una prioridad.
Los quebequenses sabrán más el miércoles a las 5 p.m., durante una conferencia de prensa del primer ministro Legault. El anuncio oficial, que originalmente estaba programado para el martes, se retrasó para dar tiempo al gobierno para resolver los detalles.
Contención de primavera
Recuerde que el 23 de marzo, el gobierno de Legault anunció el cierre de todos los negocios y negocios en Quebec, a excepción de los servicios esenciales
, inicialmente por tres semanas. Este encierro se extendió finalmente hasta mayo.
El gobierno también había prohibido a los residentes de residencias de ancianos salir sin supervisión.
Diez días antes, François Legault había abierto la pelota forzando el cierre de escuelas primarias y secundarias, CEGEP y universidades .
A fines de marzo, el gobierno también había colocado barricadas en las principales carreteras que conducen a ocho regiones, que solo se levantaron poco más de un mes después.
¿Un toque de queda extra?
Según datos del Instituto Nacional de Salud Pública de Quebec (INSPQ), no habíamos visto tantas personas hospitalizadas en cuidados intensivos desde mediados de mayo.
Varios expertos entrevistados por Radio-Canadá coinciden en que las medidas gubernamentales tomadas hasta ahora no están funcionando y creen que la población debe ser obligada a seguir reglas más estrictas.
Para André-Pierre Contandriopoulos, profesor emérito de administración sanitaria de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Montreal, entrevistado en Tout un matin , el gobierno ahora no tiene más remedio que imponer un confinamiento muy estricto, a pesar de los altos costos sociales y económicos que esto implica.
Hemos visto que la voluntad de pedir a todos los quebequenses [que limiten sus contactos sociales] no fue suficiente para frenar la progresión de la curva. […] ¿Qué otra solución tiene el gobierno? No lo tiene. André-Pierre Contandriopoulos, profesor de administración sanitaria
Según él, el sistema de salud está cerca de su punto de quiebre y pronto ya no podrá satisfacer las necesidades médicas básicas de la población. Habrá personas que tengan un accidente automovilístico y serán maltratadas. Habrá otros que no trataremos porque trataremos a un paciente de mayor prioridad
, advierte.
Otros tres expertos en salud pública entrevistados el lunes son de la misma opinión que Contandriopoulos. Algunos sugieren adoptar un toque de queda, así como cerrar negocios y escuelas secundarias durante al menos un mes. El contenido de video está disponible para este artículoError de los medios
Confinamiento más severo y toque de queda bajo consideración
COVID-19 está ganando terreno
Ya, el 28 de septiembre, François Legault había elevado el nivel de alerta en toda la provincia . Varias regiones, incluido el Gran Montreal, pasaron a la zona roja y quedaron sometidas a medidas sanitarias más estrictas.
Hasta ese día, se habían reportado 750 nuevos casos de infección por COVID-19, así como 212 hospitalizaciones y 37 pacientes de cuidados intensivos.
A pesar de este anuncio, el número de casos diarios registrados por las autoridades siguió creciendo. El 19 de noviembre, por ejemplo, el día en que el Premier Legault hizo su primer anuncio sobre el comportamiento a seguir durante la temporada navideña Quebec deploró 1.207 nuevas infecciones por COVID-19 y 651 hospitalizaciones, incluidas 101 personas atendidas en el ámbito sanitario.
