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“Todos los músicos de Woodstock con los que he hablado, cuando se les pregunta qué actuaciones les gustaron, inmediatamente mencionan a Santana como un mega-destacado obvio”, dijo Andy Zax, el coproductor de “Woodstock – Regreso al jardín: el archivo definitivo del 50 aniversario”. “, Un conjunto gigantesco de 38 CD en caja lanzado recientemente.

Santana, una banda de mermelada psicodélica de San Francisco que incorporó polirritmos latinos y africanos al blues-rock, fue uno de los actos menos conocidos en Woodstock. Se agregó al festival principalmente porque el gerente Bill Graham, también el promotor de conciertos más poderoso del país, los obligó a participar.

Cuando Santana comenzó a las 2 pm del sábado, la multitud se sorprendió por la guada, la ágil guitarra de Carlos Santana y una sección de ritmo que incluía a dos percusionistas, en ese momento poco común en las bandas de rock.

Carlos Santana llamó desde su oficina en San Rafael, California, para discutir qué dos bandas tocaron mejor que Santana, por qué Woodstock fue un glorioso experimento social y cómo un cambio en el horario lo llevó a alucinar mientras estaba en el escenario. Estos son extractos editados de la conversación.

Estamos hablando de algo que sucedió hace 50 años. ¿Tienes un recuerdo fuerte?

Sí, heredé eso de mi madre. Tengo bastante memoria fotográfica cuando se trata de música y melodías.

La banda aún no había lanzado su primer álbum. ¿Cómo te reservaron en Woodstock?

Nuestro gerente, Bill Graham, fue mi primer arcángel. Tengo ciertas personas que se presentan en el lugar y la hora correctos, y me abren grandes puertas. Bill nos invitó a su casa en Mill Valley. Aún vivíamos en la Misión (Distrito) en San Francisco. Él dijo: “Habrá un concierto que cambiará toda tu vida. Necesito que ustedes realmente me escuchen: después de este concierto, la gente comenzará a mirarlos de la forma en que ven a los Doors y a Jimi Hendrix. Ustedes se meterán en problemas porque sus cabezas se volverán tan grandes que necesitarán un calzador para entrar en una habitación “.

Ponemos los ojos en blanco y decimos: “Bill, somos de la Misión. No compramos esa cosa de estrella de rock “.

Muchos grupos tuvieron largas demoras antes de sus sets. Pero Santana fue precipitada al escenario, ¿verdad?

Cuando aterrizamos, la primera persona que vi fue a mi hermano y amigo Jerry García. Parecía uno de esos yoguis en una cueva en el Himalaya. Tenía ese beatífico, todo está bien ya mira. Para mí, él era como la seguridad, la confianza y un santuario.

Nos habían dicho que íbamos a dos bandas después de Grateful Dead. Él dice: “Bueno hombre, es mejor que te sientas cómodo porque aparentemente, no iremos hasta la una de la mañana. Es un desastre aquí. Y, por cierto, ¿te gustaría tomar algo de esto? Era mescalina. Y yo dije: “Veamos, son las 12:30 de la tarde. A las dos de la mañana, estaré bien ”. Solía ​​tomar mucho LSD y mescalina, así que sabía el momento. Después de ocho o 10 horas, estás en lo que llamamos el estado de la ameba. Tus pensamientos se vuelven muy galácticos, universales y microscópicos.

Dos horas después de tomarlo, había una cara en mi rostro que decía: “Necesitas continuar ahora mismo, de lo contrario no vas a jugar”. En este momento estaba realmente, realmente en eso, ¿sabes? Me aferré a mi fe y a lo que mi madre me enseñó. Le pregunté una y otra vez: “Solo ayúdame a estar a tono y a tiempo”.

Supongo que en 1969, la mescalina de Jerry García fue bastante potente.

Oh, lo fue. Me habían administrado un año antes. Me tomó dos o tres días coordinar después de eso. Había sido bautizado en la expansión de la conciencia, lo llamaré, así que eso no me asustó.

Sabíamos que ya tenían fama de dosificar otras bandas y, como estábamos abriendo para ellos en Las Vegas, me aseguré de lavar cuidadosamente esta lata de Coca-Cola que iba a tomar. Pero lo que no sabía es que sabían cómo poner una jeringa en la lata de refresco. Así que jugamos nuestro set y nos fuimos, y en el camino desde el aeropuerto hasta el avión, la sala se hacía cada vez más larga. Los colores en la alfombra y en la pared comenzaron a rezumar como lava. Le dije: “Oh, oh, me atraparon”. Cuando me senté en el avión, miré por la ventana mientras despegábamos, y las luces de Las Vegas parecían jeroglíficos aztecas. (Risas) Le dije: “Esto va a ser intenso”.

Cuando estabas en el escenario en Woodstock, ¿estabas alucinando?

Oh totalmente Se nota por mi lenguaje corporal. Estoy luchando con la guitarra, no luchando en un conflicto, sino como un surfista, luchando para mantener y mantener el equilibrio. Esa es la clave de todo en la vida. Ya sea que esté recto o en mescalina, mantenga la compostura y el equilibrio.

Puedes fumar marihuana y escuchar congas y música que te hace celebrar, no pensar en el miedo o Vietnam o Nixon o lo que sea

Todos ahora dicen que fue un gran set. Pero en el momento, ¿qué tipo de reacción obtuviste?

Era lo mismo que ver niños negros y marrones y niños blancos pobres en Harlem River Drive en el día más caluroso del verano, y alguien abre una boca de incendios con agua fría. Fue solo alegría!

Llegamos llenos de congas y la audiencia dijo: “Oh, esto es como estar en Hippie Hill o en la fuente (Central Park) en Nueva York”. Y puedes fumar hierba y escuchar congas, y música que te hace celebrar, no pensar en el miedo o Vietnam o Nixon o lo que sea.

Eso fue algo hermoso que mantendré fiel hasta el día que deje este planeta. Fui testigo, con mis propios ojos y mi corazón, de que las personas pueden llevarse bien, con unidad y armonía. No peleas. Comparta granola o una manta o lo que sea. Pude ver que los humanos son capaces de coexistir con benevolencia. Por eso seguimos hablando de Woodstock, hombre.

¿Quién jugó los mejores sets en Woodstock y dónde califica Santana?

Solo había tres bandas que recuerdo que estaban poniendo todo en juego. Estás jugando como Buddy Rich o Miles Davis; Estás jugando por tu vida. Sly and the Family Stone para mí es el número 1. Jimi Hendrix es el número 2. Todos los demás tienen que luchar con nosotros por el número 3.

Lo que trajimos fue básicamente ritmos y melodías africanas. Después de Woodstock, cada banda de repente comenzó a tener congas. Miles tenía congas. Los Rolling Stones tenían congas. Porque vieron que mezclar congas con guitarras es una situación en la que todos ganan, ¡especialmente con las mujeres!

Para ti, ¿cuándo fue el pico de Santana Woodstock?

Alcanzó su punto máximo cuando el público se despertó con nosotros, a pesar de que era por la tarde. Fue un soplo de aire fresco, porque la música de Santana se conecta con África y siempre te da alegría. La alegría es lo opuesto al miedo. En este momento, todo el mundo está vendiendo el miedo, desde el presidente hasta Hollywood.

¿Sabes que? Esta es la mejor parte de la entrevista, hombre. Espero que The New York Times pueda ayudarnos a tener un Woodstock en cada ciudad, cada fin de semana. Porque necesitamos los colores. Necesitamos los globos. Necesitamos las barbacoas. Filipinos, irlandeses, italianos: solo necesitamos que todos se conviertan en una criatura que celebre estar vivo.

Sé que la gente dice: “Santana tomó demasiado ácido”. ¡Bueno, tal vez no hayas tomado nada en absoluto! Ya ves lo que es. Veo lo que puede ser y lo que debe ser, como se sintió cuando cayó el Muro de Berlín, o cuando Mandela fue liberado. De eso se trataba Woodstock: una conciencia colectiva, comunidad, unidad, armonía, celebración.

Bill Graham predijo que la banda se volvería cabezota después de Woodstock. ¿Lo hizo?

Oh totalmente. En mi caso, me caí lo suficientemente pronto como para abrazar la disciplina espiritual. Me mudé a Queens, Nueva York, y me corté el pelo. No estaba tomando drogas, no estaba bebiendo, cambié mi dieta. Por 10 años. Me dediqué a un cierto código de conducta que ahora me sirve bien. Tengo más energía que cuando tenía 17 años.

Me gustaría escuchar un poco sobre tu fase de cabeza grande.

(Risas) Claro que sí. Compras coches caros y llamativos, y pierdes mucho tiempo en el espejo cambiándote de ropa. Se convierte en lo que les sucedió a Prince, Michael Jackson y Whitney Houston. Creas esta máscara, se llama persona, como Batman y Bruce Wayne, que es difícil de mantener. Es por eso que hice un cambio para dejar eso y convertirme en una persona en lugar de una personalidad.

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