Washington, 18 mar (EFE).- El presidente Trump confirmó en Twitter que Canadá y Estados Unidos cerrarán su frontera al tráfico no esencial.
We will be, by mutual consent, temporarily closing our Northern Border with Canada to non-essential traffic. Trade will not be affected. Details to follow!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 18, 2020
Las negociaciones entre Ottawa y Washington continuaron durante parte de la noche para establecer condiciones de cruce fronterizo para aquellos considerados esenciales, como los camioneros que entregan alimentos y mercancías a ambos lados de la frontera. frontera o trabajadores en sectores considerados críticos, confirmó el martes por la noche una fuente del gobierno que solicitó el anonimato.
Después de anunciar el cierre de las fronteras a todos los viajeros, excepto los estadounidenses, los miembros del cuerpo diplomático y los miembros de la tripulación de las compañías aéreas, el lunes, el gobierno de Trudeau endurece un paso más el control de limita para detener la propagación de COVID-19.
Los canadienses que actualmente se encuentran en los Estados Unidos, hay un promedio de dos millones de “snowbirds” que huyen del invierno canadiense por el calor y el sol de Florida, podrán regresar a sus hogares sin ser regresados a la frontera, a- nos aseguraron el martes por la noche. “Obviamente tienen el derecho constitucional de regresar al país”, dijo una fuente del gobierno.
Alrededor de 200,000 personas cruzan la frontera entre Canadá y Estados Unidos diariamente, dijo el martes la viceprimera ministra Chrystia Freeland. “Esta es una relación única para Canadá y es importante manejar bien el problema fronterizo”, dijo.
2 mil millones
El equivalente en dólares de los bienes que también cruzan la frontera entre Canadá y Estados Unidos cada día.
El acuerdo en el que están trabajando las dos capitales tiene como objetivo garantizar la libre circulación de bienes entre los dos países y limitar en la medida de lo posible las consecuencias económicas de tal medida sin precedentes en la historia de los dos países.
Dentro del gabinete de Trudeau, existe el temor de que Estados Unidos suplante pronto a Europa como el epicentro de la pandemia de COVID-19. Detrás de escena, lamentamos la lentitud de la administración Trump para enfrentar esta crisis con fuerza, especialmente porque un número significativo de estadounidenses no tiene acceso a un sistema de atención médica digno de ese nombre. Hazte la prueba.
Por otro lado, el gobierno de Trudeau no quería provocar indebidamente al presidente estadounidense, conocido por su imprevisibilidad, al anunciar unilateralmente el cierre de la frontera a los viajeros estadounidenses el lunes sin iniciar primero un diálogo para encontrar un acuerdo que garantice la libertad movimiento de bienes y personas esenciales.
En una conferencia de prensa el martes por la mañana, el primer ministro Justin Trudeau dijo que la opción de cerrar completamente la frontera a todos los viajeros, excepto “personas esenciales”, como afirman muchas provincias, era una opción que permaneció al alcance de su gobierno.
“Como dije, nos estamos coordinando con los Estados Unidos, con las autoridades estadounidenses. Estamos viendo todo lo que podemos hacer para proteger a los canadienses. Nada queda fuera. Estamos viendo todas las diferentes opciones “, dijo.
Haremos todo lo posible para mantener seguros a los canadienses y asegurarnos de que, al mismo tiempo, no perjudiquemos a los canadienses al limitar lo esencial y los bienes.
Justin Trudeau
En Washington, el presidente Donald Trump también insinuó el martes que su administración estaba discutiendo con las autoridades canadienses sobre una serie de medidas fronterizas.
“No quiero decir eso, pero estamos discutiendo cosas con Canadá y estamos discutiendo cosas con México, y con toda honestidad, nuestras relaciones son maravillosas con los dos países”. Acabamos de concluir un nuevo acuerdo comercial, y nuestras relaciones son muy fuertes “, dijo al presentar al Congreso un paquete de estímulo económico de $ 850 mil millones.
El primer ministro de Quebec, François Legault, instó al gobierno federal la semana pasada a cerrar las fronteras a todos los viajeros para contener la propagación del nuevo coronavirus antes de que sea demasiado tarde.
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, también exigió una medida tan extraordinaria mientras exigía, como su homólogo de Quebec, que se mantuviera el libre flujo de bienes.
Otro primer ministro, John Horgan, de Columbia Británica, aprovechó la conferencia telefónica del viernes pasado para plantear preocupaciones sobre la frontera que la Columbia Británica comparte con Washington, que es uno de los epicentros de la epidemia en los Estados Unidos.
