Según el Primer Ministro de Quebec, “si todo ha ido como lo hemos visto durante unos días”, mientras las hospitalizaciones “se están estabilizando”, “podremos comenzar de nuevo con precaución para reabrir la economía y encontrar una vida más normal”.
Una reapertura de escuelas y guarderías sería posible antes del 4 de mayo en este contexto. “Los niños tienen mucho menos riesgo”, dijo Legault. Sin embargo, será necesario asegurarse de que “no pasen tiempo cerca de sus abuelos”, “por un tiempo”.
Para el director nacional de salud pública, Dr. Horacio Arruda, “hay que entender que los jóvenes que podrían contraer la enfermedad casi sin síntomas, es como si estuvieran vacunados. Es la vacunación natural que se impondrá. Y es importante, en la sociedad, que haya una cierta parte de la población que esté vacunada ”.
Por su parte, la Ministra de Salud y Servicios Sociales, Danielle McCann, está preparando una orden ministerial para autorizar la transferencia de trabajadores de la educación a la red de salud. Se podría recurrir a profesores de enfermería para ayudar a la red, por ejemplo. “En nuestra opinión, hay personas que harán una contribución realmente apreciada en nuestros CHSLD”, dijo. Realmente fue para estas personas, para los CHSLD, que hicimos esta solicitud porque en nuestra red, nos aprovechamos de todos los que podemos aprovechar. “
Las discusiones tienen lugar con los sindicatos, “y la respuesta es que creo que las personas se dan cuenta de la gravedad de la situación”, dijo.
Sin embargo, el presidente del CSN, Jacques Létourneau, sostiene que “obligar al personal de educación a trabajar en la red de salud, sin ninguna forma de consulta preliminar cerca del director en cuestión, es muy desgarrador”.
“Estamos exigiendo al gobierno que se establezcan pautas muy claras para que estos nuevos poderes se puedan utilizar con el mayor cuidado”. También se deben enviar instrucciones muy específicas a este efecto a los distintos empleadores ”, agregó. “Entendemos muy bien la situación excepcional en la que nos encontramos y la necesidad de implementar medios excepcionales para responder a la crisis. Pero el gobierno no debe abusar de él, a riesgo de desacelerar el impulso de movilización demostrado por los empleados de nuestros servicios públicos. “
