NEW YOTK, 07 ABRIL.- Este domingo, miles de judíos estadounidenses se reunieron en Nueva York, marcando seis meses desde el ataque de Hamás contra Israel y la posterior toma de rehenes. La concentración, convocada por más de cincuenta organizaciones judías de todo el país, buscaba la liberación inmediata de los 133 rehenes que aún permanecen en manos de Hamás.
Aunque la manifestación se presentaba como “apolítica”, la presencia de cientos de banderas de Israel reveló su fuerte apoyo al estado hebreo en un momento de distanciamiento relativo con el gobierno de Joe Biden.
A diferencia de eventos anteriores, esta vez no hubo discursos de figuras políticas destacadas como el senador Joe Schumer, el alcalde de Nueva York Eric Adams o la gobernadora del estado Kathy Hochul, todos demócratas. Este silencio puede reflejar la sensibilidad política en torno al conflicto palestino y su impacto en las próximas elecciones.
La concentración tuvo lugar frente a la sede central de la ONU, donde los manifestantes abuchearon al mencionar el nombre de la organización, en línea con las posturas de Israel. También se abuchearon las palabras del congresista Jerry Nadler, quien abogó por no olvidar el sufrimiento palestino.
Los discursos más aplaudidos fueron los que abogaron por una postura firme, como el exprimer ministro israelí Naftali Bennet, quien afirmó que la guerra no puede detenerse mientras haya un solo rehén en manos de Hamás.
En representación del presidente argentino, Javier Milei, el cónsul de Argentina en Nueva York, Pablo Piñeiro, destacó la importancia de la liberación de rehenes, especialmente los de nacionalidad argentina.
La diversidad de opiniones dentro de la comunidad judía en Nueva York refleja la complejidad del conflicto en Gaza, con posturas que van desde un apoyo inquebrantable a Israel hasta críticas a la destrucción en Gaza y la pérdida de vidas palestinas.
