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Bogotá, 02 MAYO.- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha reiterado sus acusaciones contra la oposición, a la que acusa de intentar un golpe de Estado para sacarlo del poder. En un encendido discurso pronunciado en la Plaza de Bolívar con motivo del Día del Trabajo, Petro advirtió que si se intenta un golpe, el pueblo saldrá a las calles a defender la democracia.

Petro, quien desde hace meses habla de la posibilidad de un “golpe blando” en su contra, afirmó que el supuesto golpe no se llevaría a cabo con tanques de guerra, sino mediante acusaciones de superar los topes de gastos electorales en las elecciones de 2022.

“Si van a intentar un golpe enfrentarán al pueblo en las calles. Si intentan un golpe contra la voluntad popular, tal como hicieron el 19 de abril de 1970 (día que inspiró el nacimiento de la guerrilla M-19, a la cual perteneció), el pueblo en las calles defenderá la democracia y la voluntad popular”, declaró Petro ante una multitud de trabajadores.

El presidente colombiano ha enfrentado una fuerte oposición desde su llegada al poder, con sectores críticos cuestionando sus políticas y acusándolo de autoritarismo. Las tensiones políticas se han incrementado en las últimas semanas, con acusaciones cruzadas entre el gobierno y la oposición.

Petro ha denunciado en varias ocasiones la existencia de un plan para desestabilizar su gobierno y forzar su salida del poder. El mandatario ha señalado a sectores de la derecha política, las fuerzas armadas y los medios de comunicación como los principales actores detrás de este supuesto golpe.

Petro ha hecho un llamado al pueblo colombiano a defender la democracia y la voluntad popular en caso de que se intente un golpe de Estado. Su discurso en la Plaza de Bolívar fue una muestra de su determinación para resistir cualquier intento de desestabilización.

La oposición ha rechazado las acusaciones de Petro, calificándolas de infundadas y de una estrategia para desviar la atención de los problemas del país. Los líderes opositores han acusado a Petro de generar un clima de polarización y confrontación.

El panorama político en Colombia se mantiene tenso, con el gobierno y la oposición enfrentados en una batalla por el poder. Las acusaciones de golpe de Estado y la respuesta de Petro han generado preocupación sobre la estabilidad del país y el futuro de la democracia

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